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MONSEÑOR PAROLÍN: SEA USTED MINISTRO DEL INTERIOR

Daniel Samper Ospina

Parolín sí se haría notar en el interior y sería capaz de levantar este gobierno, cada vez más desgonzado y blandito.

El papa Francisco acaba de nombrar como su segundo hombre de a bordo a monseñor Pietro Parolín en reemplazo de monseñor Bertone que, ya es justo decirlo, tiene nombre de bloqueador solar. Para muchos católicos fue una grata sorpresa haberse acostado la noche del jueves con Bertone y haber amanecido el viernes con Parolín: no en vano estamos ante un miembro metelón de la santa institución que tiene por delante el desafío de modernizarla, por un lado, y el de evitar, por el otro, que la gente se ría cuando el mismo Parolín diga en las homilías “lo tenemos levantado hacia el Señor”.

La hoja de vida del nuevo secretario general del Vaticano es envidiable: Parolín se ha destacado en todas las posiciones, en todas, aunque muy particularmente en la de misionero. En efecto, monseñor encabezó misiones pastorales en Nigeria, México y, más recientemente, Venezuela, donde posiblemente inspiró la famosa frase del presidente Nicolás Maduro, según la cual Nuestro Señor multiplicó los panes y los penes. Nadie duda, pues, de que, con ayuda de Parolín, Bergoglio ganará en presencia.

Hago toda esa introducción porque ha llegado el momento de solicitarle al papa Francisco que nos ceda a su mano derecha para que Santos lo incluya en el gabinete y recupere la popularidad. Porque con el equipo que nombró esta semana, dudo de que lo consiga.

No se me entienda mal. No quiero criticar al presidente, mucho menos tras la reciente crisis ministerial, que permitió la renuncia protocolaria de ministros y altos consejeros: es decir, de unas 250 personas, incluyendo a Juan Carlos Mira, el consejero para las regiones, aquel un muchacho digno de su apellido. Porque mientras las regiones arden, Juan Carlos mira.

No lo quiero criticar, digo, y menos ahora que estrena un reluciente conjunto de ministros reconocidos para cualquiera, cuyos nombres se me escapan en este momento. El de todos, salvo el de Amylkar Acosta: egregio prohombre, prístino, puro, que, como diría Simón Gaviria de Guerra Tulena, representa la sangre fresca del Partido Liberal. 

Sin embargo, yo habría refrescado al gobierno rotando a sus funcionarios más destacados. Pongamos por caso a Luchito Garzón, consejero para el diálogo social: si Luchito no tomó medidas en el único momento en que el cargo que le inventaron tenía alguna relevancia –aquel momento en que la protesta estaba tan prendida como él mismo después de un concierto de don Omar– es porque está tratando de dejar de tomar. 

Y eso no solo es loable sino que explica la frase que legó en aquellos días aciagos, digna de ser tallada en mármol para que no la olviden las futuras generaciones: “El paro no es ni muy muy, ni tan tan”, dijo entonces, mientras daba un brinquito y se subía los pantalones, escurridos como su gestión.

Dicho lo anterior, Luchito, con un par de tragos, destacaría como ministro de Ambiente. Y Gina Parody de Agricultura: que hable con una papa en la boca es un evidente guiño para los paperos. El ministro de las TIC podría haber pasado a la cartera de Salud para seguir repartiendo tabletas como un loco, sean las que sean, sin preguntar si las saben prender. Y Simón Gaviria habría podido ingresar al de Educación, al menos para que la reciba y no se dé por aludido cada vez que el presidente utilice la expresión “tacan burro”. 

Más delicado es el caso de Carrillo. Entiendo que enviar a Federico Renjifo, con todo y novia, a la embajada de París, es una manera de apropiarse de la política del amor que pregonaba el alcalde Petro, transformada por su mujer en la política de los celos. Pero sería una afrenta que no le cedan esa embajada a Fernando Carrillo, el pobre exministro del Interior que durante 15 días tuvo que enfundarse la chaqueta Burberry´s que utilizaba para atender las crisis de la provincia, e ir de un lado a otro sofocando huelgas. 

Se la tuvo que poner dos semanas seguidas, todos los días: ¿creen que es agradable ese plan? ¿Creen que es agradable pasar una noche entera en Tunja, otra noche entera en Ipiales? ¿Cuánto vale lavar esa chaqueta en Classic? ¿Pagará ese gasto el gobierno, al menos?

El ministro Carrillo, por eso, merece irse a París. Y acá entra monseñor Parolín. Porque, a diferencia del desafortunado Aurelio Iragorri, Parolín sí se haría notar en el Interior y sería capaz de levantar este gobierno, cada vez más desgonzado y blandito, y ávido de una reerección que parece imposible.

Mis relaciones con la Iglesia han sido como las de ciertos sacerdotes con sus monaguillos: tirantes. En especial desde el escándalo de pedofilia del padre Rozo: un cura que tenía palito para los niños, por decirlo en términos coloquiales. Pero, seamos sensatos: las dos máximas autoridades del país, el presidente y el vicepresidente, somatizaron sus problemas de próstata en el desempeño del gobierno, que ahora sucumbe ante los paros. Y si alguien sabe de paros, ese es Parolín.

No me cabe duda de que, a diferencia de los nuevos ministros, monseñor Parolín representaría un cambio verdadero. Al menos solucionaría la penosa impotencia gubernamental. Y ayudaría a que Santos no se queme, asunto que parece inevitable aunque se embadurne de bloqueador solar. A menos de que sea marca Bertone.

EL TIEMPO

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CONFIDENCIALES

JUAN PAZ

Censurado en el gobierno de Juan Manuel Santos

CAMBIO

Censurada en el gobierno de Álvaro Uribe Vélez

EL ESPECTADOR

ALTO TURMEQUE

Superhéroes

El campeón estadounidense de fisicoculturismo y actor Lou Ferrigno posó junto al dibujante cómico y creador de historietas Stan Lee, durante el encuentro anual Muscle Beach en California (EE.UU.). Ferrigno interpretó a Hulk, personaje creado por Lee, y fue galardonado con el premio Una Vida de Logros en el campeonato.

El amigo del partido 

En la renuncia protocolaria que presentó el gabinete ministerial del presidente Juan Manuel Santos la semana pasada, cada ministro tenía que explicar su 'estrategia' para salir del paro agrario y los resultados de su cartera hasta la fecha. Resulta que cuando llegó el turno del ministro de Trabajo, Rafael Pardo (Partido Liberal), el presidente lo escuchó y le pareció todo muy bien, excepto por una cosa. Y es que le mostraron videos y fotos en los que aparece un congresista de su partido, el representante José Joaquín Camelo, apoyando las manifestaciones y hablando, en general, con líderes del sector papero de Cundinamarca. El ministro claramente se sorprendió, porque además son amigos. Así que el ministro Pardo no tuvo más opción que hacerle un pequeño reclamo al representante Camelo, preguntándole las razones por las que le hacía eso al Partido y que lo estaba haciendo quedar mal. Camelo le respondió que en su deber de representación, tiene el derecho de hacerlo y de representar los intereses de la región que lo eligió.

 

Información privilegiada

La ratificación de la ministra de Educación, María Fernanda Campo, no cayó para nada bien en algunos sectores políticos, pues para muchos su gestión no ha sido la mejor. Sin embargo, lo que más preocupa no es lo que tiene que ver con asuntos propios de su cartera, sino el posible conflicto de intereses que pueda surgir del nombramiento de su exesposo, Rubén Darío Lizarralde, en el Ministerio de Agricultura. Y es que el asunto no es de poca monta. En uno de los debates de control político en la Cámara de Representantes, el congresista Iván Cepeda reveló documentos que demostrarían que la ministra Campo figura como representante legal de un sociedad anónima simplificada, a través de la cual Indupalma —empresa de la cual fue presidente Lizarralde— adquirió una serie de predios en el Vichada que tienen origen baldío. Lo que para algunos especialistas constituye una avanzada técnica para pasarse por la faja la Ley 70 de 1994, que prohíbe la acumulación de este tipo de tierras.

 

Una invitación social

Durante los días en los que Colombia vivió las consecuencias del paro agrario, las entidades públicas recibieron una sugerencia de parte de la oficina de prensa de la Presidencia, que consistía en minimizar los hechos. Así, los distintos funcionarios fueron invitados a dejar de utilizar sus redes sociales para referirse a la situación, o hacerlo en términos favorables hacia el Gobierno.

 

De memoria

El Centro Nacional de Memoria Histórica, el Ministerio de Cultura, el Departamento para la Prosperidad Social de la Presidencia de la República y el Archivo de Bogotá inauguran este martes la exposición “El sueño de la Unión Patriótica: memorias para la paz y la democracia”, evento con el que se pretende hacer una reflexión sobre los procesos de reconstrucción de memoria histórica que llevan a cabo los sobrevivientes del genocidio de este movimiento. La muestra es organizada por el Colectivo Mnemosyne y fue el proyecto ganador de la convocatoria de Estímulos e Iniciativas del Centro Nacional de Memoria Histórica 2013.

 

La “extraña sustancia”

En las instalaciones del Fondo Nacional del Ahorro se está viviendo un ambiente asfixiante. Por lo menos así lo consideran algunos funcionarios que hablaron con este diario. “Hay algo raro en el ambiente. Las personas se están enfermando con fuertes dolores de cabeza y han aparecido brotes en la piel”. El edificio, ubicado en la calle 12 con carrera 65, está plagado de “una sustancia extraña desde hace como 20 días”. Los funcionarios han alcanzado a especular con partículas de plomo en el aire. “Las embarazadas tienen prohibida la entrada. Las enfermeras no nos recetan nada, porque puede ser contraproducente con esa sustancia”. El viernes, el personal abandonó su puesto de trabajo antes de que comenzara partido de la selección Colombia.

 

Monumento a McCausland

Camina con rapidez una iniciativa para erigirle una estatua al cronista Ernesto McCausland, que se sumaría a los monumentos ya existentes de Esthercita Forero, Joe Arroyo y una silueta de Shakira. Muchos habitantes se han acercado a la Alcaldía a depositar las llaves que servirían como material primario para su construcción. Sin embargo, voces disonantes dicen que sería mejor invertir esos recursos en la realización de talleres, conversatorios y charlas para estimular a los jóvenes a escribir crónicas, género periodístico que hizo famoso al desaparecido comunicador.

El incansable Freddy Cole

Luego de su arribo a Barranquilla después de varias horas de vuelo, el cantante y pianista estadounidense Freddy Cole, hermano del desaparecido Nat King Cole, dijo que no quería quedarse en el hotel y que prefería recargar energías escuchando la música de los demás invitados a Barranquijazz. Cole, de 82 años, se sentó entre la multitud y mientras estuvo en silencio, nadie se le acercó. Sin embargo, tan pronto alentó a sus colegas (el pianista Steve Kuhn y el saxofonista Paquito D’Rivera), algunos integrantes del público se percataron de su presencia y se le acercaron a expresarle su gratitud por compartir con ellos esa velada en el Salón Jumbo del Country Club.

SEMANA

CONFIDENCIALES

Cambios en el primer anillo

Se van a presentar los siguientes movimientos en el alto gobierno. Miguel Silva, asesor externo, se va a dar clases a la Universidad de Chicago. La alta consejera, Catalina Crane, se va a radicar en Francia donde su novio, el exministro de Minas Federico Renjifo, va a ser nombrado embajador. Juan Carlos Mira, el alto consejero para las Regiones, va a entrar a trabajar en un cargo de alto nivel en Bavaria. Además de estas consejerías, queda libre también la secretaria privada de Palacio, que desempeñaba Cristina Plazas. Para ese cargo suena María Isabel Nieto.

 

Tigres asiáticos

Acaba de publicarse el último ranking de la OCDE que identifica a los estudiantes más brillantes integralmente en el mundo. El concepto de integral se basa en que algunos países tienen resultados excelentes en matemáticas, otros en comprensión de lectura y otros en ciencia, pero muy pocas veces se reúne la excelencia de las tres actividades en una sola persona. El estudio mide cuántos son ‘genios’ de cada 100 estudiantes. Los resultados son los siguientes.

En primer lugar está China, donde de cada 100 estudiantes hay 15 con esa condición. Las grandes potencias académicas, Francia, Reino Unido, Alemania y Estados Unidos se quedan rezagadas y no superan el 5 por ciento. Después de China los cinco primeros lugares son los siguientes: Singapur (el 12 por ciento), Nueva Zelanda (el 10 por ciento), Finlandia, Hong Kong y Japón (todos con el 8 por ciento). En Latinoamérica todos los países están por debajo del 1 por ciento.

 

Los dos equipos

Ahora que está candente el debate sobre la conveniencia o no de vender Isagén, llama la atención el calibre de las alineaciones tanto a favor como en contra. A favor están Rudolf Hommes, Guillermo Perry, Roberto Junguito, Carlos Caballero Argáez, Roberto Steiner y Sergio Clavijo. Y en la oposición están Salomón Kalmanovitz, Eduardo Sarmiento, Cecilia López, Mauricio Cabrera y Amylkar Acosta. Teniendo en cuenta que este último acaba de ser nombrado ministro de Minas, queda por verse cómo se ajusta a la decisión del gobierno de vender la entidad.

 

Personería en peligro

A pesar de que el Consejo de Estado le devolvió la personería jurídica a la Unión Patriótica en un fallo reciente, hay un riesgo muy grande de que este partido vuelva a perderla. Por la nueva reglamentación del umbral, los partidos políticos deben sacar más de 450.000 votos para poder seguir existiendo, y pocos creen que la UP, de lanzarse en las próximas elecciones, logre llegar a esa cifra. Reputados juristas dicen que la única manera de que ese partido sobreviva sería que le pidiera un salvavidas al Consejo Nacional Electoral. Este consistiría en solicitar que se aplace la entrega de la personería jurídica hasta que el partido pueda reconformarse para salir a competir al ruedo político o que se suspenda la norma que establece el umbral en su caso.

 

Un caso perdido

En la Corte Internacional de Justicia de La Haya está a punto de fallarse un diferendo marítimo entre Perú y Chile que tiene ciertas analogías con el caso de Colombia y Nicaragua. Perú y Chile suscribieron en 1952 un acuerdo pesquero con una división acordada que para Chile es la frontera marítima. Sin embargo, Perú no la reconoce y quiere aplicar el derecho contemporáneo del mar, el cual delimitaría la frontera en términos ventajosos para ese país. Ante la imposibilidad de ponerse de acuerdo, Perú demandó a Chile ante esa Corte y el caso será fallado este mes. Ante los excesos que se cometieron en el fallo contra Colombia, hay una gran expectativa sobre cómo será este veredicto.

 

Fallos controvertidos

Y hablando del fallo de La Haya, ahora que está por definirse la posición que va a asumir Colombia frente a este, vale la pena hacer un recuento de las más controvertidas decisiones de esa Corte. Estados Unidos se ha negado a cumplir las órdenes de este tribunal dos veces. En la década de los ochenta no pagó la indemnización a Nicaragua que el organismo le había impuesto por minar la bahía de Managua durante la guerra de los Contras.

Y el otro caso fue a finales de los noventa, cuando el gobierno estadounidense decidió aplicar la pena de muerte contra un ciudadano alemán, a pesar de que la Corte de La Haya le había pedido que no lo hiciera. Francia también decidió desacatar un fallo en 1973 que le impedía realizar más pruebas nucleares en el Pacifico, cerca de Nueva Zelanda.

 

Fallos controvertidos II

Otros litigios que han causado controversia han sido por fronteras marítimas. Reino Unido ganó en los años setenta una disputa con Islandia pues este había decidido ampliar su área de pesca. La Corte le dio la razón a Londres, pero Reikiavic no quiso acatar la sentencia. Años después terminaron conciliando. Otra pelea tuvo lugar entre Chile y Argentina  por cuenta de tres islas. La Corte determinó que estas pertenecían a Santiago, pero Buenos Aires rechazó la decisión. La mediación del Vaticano logró estabilizar la disputa, pues ambos países amenazaron con irse a la guerra.

 

Ministros y excónyuges

El revolcón ministerial va a producir una situación sin antecedentes. El nuevo ministro de Agricultura, Rubén Darío Lizarralde, es el exesposo de la ministra de Educación, María Fernanda Campo. Por lo tanto los dos excónyuges van a quedar frente a frente en el Consejo de Ministros. Afortunadamente tienen muy buena relación y los dos ministerios tienen muy poco en común.

Al mando de Bavaria

Grant Harries, quien se venía desempeñando como presidente de Unión de Cervecerías Peruanas Backus y Johnston, comenzará a dirigir Bavaria a partir de noviembre. El británico Harries se vinculó en 1984 a la cervecería sudafricana SABMiller y ocupó diversas posiciones, entre ellas la presidencia de la multinacional en Rusia. Reemplazará a Richard Rushton, quien regresará a su natal Sudáfrica para dirigir Distell Group, otra compañía productora de bebidas en la cual SABMiller tiene participación.

Unumpentio

Exactamente diez años y 150 milésimas de segundo tardó un grupo internacional de investigadores para confirmar la existencia de este nuevo elemento químico. Uno de los responsables de que esta nueva palabra y su símbolo Uup aparezcan pronto en los libros de química es el colombiano Luis Gerardo Sarmiento. El elemento sería el número 115. Ahora solo espera una última aprobación para figurar en la tabla periódica.

CUANDO EL RÍO SUENA

Polémica al rojo vivo

La reglamentación aduanera que pondrá en marcha el gobierno sigue causando un gran debate porque permite el cargue y descargue de mercancías en puertos flotantes (fondeo). Gremios, empresarios y autoridades portuarias del Atlántico argumentan que esto sería un ‘zarpazo’ al puerto de Barranquilla, pues las mercancías no se descargarían allí sino en zonas especiales de acceso al mar o en el río Magdalena, lo que les ocasionaría graves perjuicios económicos. La ministra de Transporte, Cecilia Álvarez, informó que un equipo compuesto por funcionarios de ese despacho, la Dian, la Dimar y la Superintendencias, de Puerto y de Industria y Comercio, entre otras, analiza la medida y en un mes definirá los términos de la nueva reglamentación.   

Menos diésel y más gas

Un grupo de empresarios del sector energético le solicitó al gobierno fomentar el uso del gas vehicular en el transporte masivo porque es más económico y amigable con el medioambiente, comparado con el diésel. Si bien en el país está en aumento el uso de este combustible y cerca de 450.000 vehículos ya lo tienen, especialmente los taxis, todavía está lejos la meta del millón de vehículos que espera el sector privado. Los únicos sistemas de transporte masivo que utilizan este combustible son los de Medellín (Metroplús) y Cartagena (Transcaribe)

Efectos de la violencia

Un informe dado a conocer por el Banco Mundial y el Instituto para la Medición y Evaluación de la Salud señala que, con excepción de los hombres jóvenes, la mayoría de las personas de América Latina y el Caribe vive actualmente mucho más que hace 40 años. La tasa de mortalidad ha descendido más del 80 por ciento entre los niños y las niñas de hasta 4 años de edad, y más del 50 por ciento en el caso de las mujeres de entre 20 y 44 años. Pero la tasa de mortalidad de los varones entre 15 y 19 años ha aumentado 1 por ciento, en gran parte debido a los accidentes de tránsito y la creciente violencia en la región.

EL TIEMPO

TELEFONO ROSA

‘Ya me casé’

La actriz Carolina Gómez se casó en secreto con el español Borja Aguirre y su hijo Tomás Hoyos fue testigo. Ahora prepara la celebración familiar de la unión. Carolina también es la protagonista de la versión latina de la serie ‘Nip Tuck’ Todo en la revista ‘Aló’ que circula esta semana.

Liberal pero ‘lopista’

Al exfiscal y también exprocurador Alfonso Gómez Méndez no le gustó para nada que los periodistas, cuando se conoció el jueves su nombramiento como Ministro de Justicia, dijeran que él era una nueva cuota samperista en el gabinete del presidente Juan Manuel Santos. De hecho, según contó, cuando el primer mandatario le hizo el ofrecimiento del importante cargo, se tomó un tiempo para explicarle cómo había sido su trayectoria en el liberalismo y no dudó en decirle que si a él lo iban a identificar con alguna facción liberal, se consideraba ante todo “liberal lopista”. Él reconoce al expresidente Alfonso López Michelsen como mentor.

Honor a Juan Pablo

Juan Pablo Montoya acaba de recibir el que es considerado el más alto honor para los hispanos en EE. UU.: el Premio a la Herencia Hispana, de la Fundación de la Herencia Hispana. Lo recibió el jueves con Eva Longoria, Lucero, Diego Luna y Los Tigres del Norte. Es un reconocimiento a su carrera deportiva, a su papel como Embajador de Buena Voluntad de la ONU y a la labor de su fundación Fórmula Sonrisas.

Ministra afroitaliana

La III Cumbre Mundial de Alcaldes Afro, que se realizará en Cali y Cartagena, tendrá una invitada de lujo: la ministra italiana de Integración, Cécile Kyenge, primera mujer afro nombrada en un cargo tan alto en ese país. La ministra ha sido noticia mundial por los constantes ataques racistas que ha recibido. En la cita en Cali le harán un gran homenaje el 12 de septiembre.

Zulu, la hija de Antonio de la Rúa

Por primera vez, la caleña Daniela Ramos y el argentino Antonio de la Rúa presentan a su hija Zulu. La revista ‘¡Hola! Colombia’ logró en exclusiva una entrevista que revela detalles de su nacimiento y nos muestra a unos padres muy enamorados y entregados a su hija. En la nueva edición de esta publicación, encontrará la casa en Cartagena de María Fernanda Valencia y su familia; una entrevista con Bruno Mars, cantante del momento, y lo mejor de las pasarelas del Fashion Week de Nueva York.

Confidencias de un galán

En México y en exclusiva, Alejandro Fernández habló de su nuevo disco y de los cambios personales y físicos que llegan con este álbum. El artista es la portada de la ‘Elenco’ que circula este jueves con EL TIEMPO.

A toda

De Londres al Corralito

Snog, la exitosa cadena de tiendas de Frozen Yogurt creada en Inglaterra por el paisa Pablo Uribe y un canadiense, Rob Baines, acaba de abrir un local con una decoración muy original en la ciudad antigua de Cartagena. Como novedad combina su famoso yogur con frutas exóticas colombianas.

En radio y en Internet

María Alejandra Villamizar ha empezado a trabajar como periodista y comentarista en las mañanas de Blu Radio, pero eso no quiere decir que haya abandonado el portal informativo ‘Confidencial Colombia’. Simplemente, combinará las dos cosas.

Otra cinta ‘made in’ Cali

El 11 de octubre estrenarán ‘Amores peligrosos’, nuevo largometraje de Antonio Dorado, autor del guion con el escritor Umberto Valverde, el hombre de la idea original. Kathy Sáenz y Marlon Moreno están en el elenco, pero la gran estrella es Juanita Arias, cuya actuación dará para hablar.

EL COLOMBIANO

DE BUENA FUENTE

EL NUEVO SIGLO

OF THE RECORD

Enfoque regional

Tras el remezón ministerial son muchos los análisis que se empezaron a hacer. Se dijo en los corrillos políticos, por ejemplo, que el presidente Santos sacrificó a ministros bogotanos para darles cabida a titulares oriundos de otras regiones del país, y que esa intención fue bastante evidente en la forma en que el Jefe de Estado enfatizó el origen caucano, tolimense, caleño, guajiro, santandereano y barranquillero de los nuevos integrantes del gabinete. La cuota de mujeres en Palacio también se amplió con la llegada de Tatyana Orozco a un cargo tan importante como la Dirección Nacional de Planeación. 

 

No va a La U

Lo que más sorprendió en el ajuste en el gabinete fue que se quedó el titular del ministerio de Comercio Exterior, Sergio Díaz-Granados, a quien todos daban como seguro nuevo presidente de La U. Es más, en los pasillos de esa cartera ya se estaban organizando actos de despedida al dirigente costeño ¿Por qué lo dejaron? Una alta fuente de Palacio indicó que a escasos once meses de entregar el poder y con unos industriales y sector manufacturero pidiendo un plan de choque en materia de impulso a la competitividad, quien mejor puede liderar ese proceso es Díaz-Granados, pues él estuvo al frente de la negociación de los TLC, a los que muchos culpan de la caída en el sector manufacturero local.

 

¿Sería Prieto?

¿Entonces quién será el presidente de La U? En vista de que el nombre de Díaz-Granados salió de la baraja, en las toldas de esa colectividad se da por seguro que las riendas serán tomadas por Roberto Prieto, exdirector ejecutivo por Colombia y Perú ante el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Se sabe que en la Casa de Nariño respaldan su nombre, aunque en la bancada hay senadores y representantes que consideran que no tiene el suficiente bagaje político para ser el vocero del partido en plena época electoral y, aún más, cuando el presidente de La U tiene que convertirse en el principal escudero de la campaña presidencial reeleccionista.

 

Mockus va que va

“Va a jugar”. Esa fue la respuesta que una persona muy allegada al excandidato presidencial Antanas Mockus dio al preguntársele sobre si el también exalcalde de Bogotá iba a volver a meterse en la arena política ahora que asoman los comicios para Congreso y la Casa de Nariño. Según la fuente consultada, Mockus es un “político, un político distinto a muchos, pero un político, en la medida en que ve esta actividad como una función de servicio público y sabe que su particular forma de hacer política es eficaz y tiene eco entre la ciudadanía”.

 

Y el vice ahí…

Siguen los ecos a la encuesta Gallup revelada días atrás. Por ejemplo, se dice que quedaron muy contentos en las toldas del vicepresidente Angelino Garzón, quien, después del presidente estadounidense Barack Obama, es el dirigente colombiano con más alta imagen favorable (70%). De nuevo se escucha decir en los corrillos gobiernistas que Santos debería insistirle a Garzón que reconsidere su negativa a ser, de nuevo, su segundo a bordo en la campaña reeleccionista. ¿Será que Santos lo convencería? O mejor ¿Será que Santos sí contemplaría la posibilidad de hacerle esa petición a su vice?

DINERO

CONFIDENCIAS

Sarmiento, feliz

Un dato pasó desapercibido recientemente. Corficolombiana, el brazo de inversión en infraestructura del magnate Luis Carlos Sarmiento, logró su precio máximo histórico en la Bolsa de Valores de Colombia. Fue el pasado 22 de agosto, cuando llegó a $38.900. En las últimas jornadas el  título se ha mantenido en estos niveles. ¿La razón? Parece que, además de los excelentes resultados financieros (que dieron para un dividendo semestral de $360 por acción lo que da un 7,3% anualizado, uno de los más altos del mercado), la compañía está a punto de entrar en varios de los más grandes proyectos de infraestructura. El magnate colombiano tiene otro motivo para celebrar. 

Las movidas de Pacific

Por estos días, en las oficinas de Pacific Rubiales sus directivos preparan dos movidas de marca mayor. La primera tiene que ver con la inauguración de una oficina en Panamá, desde donde la organización manejará su estrategia de consolidación regional y sus planes de expansión hacia otras latitudes. Y la segunda está relacionada con la eventual apertura de una nueva división de negocios mediante la creación de una compañía encargada de manejar toda la infraestructura de la petrolera. En manos de una banca de inversión, sin embargo, está la misión de definir la viabilidad del modelo. Antes de que termine el año se conocerá la noticia. 

Confidencias

¿Protección o bloqueo?

Varios afectados por el colapso de Factor Group se han quejado ante la Supersociedades de la imposibilidad de recuperar al menos una parte de los $123.000 millones que le confiaron a Acción Fiduciaria, uno de los vehículos de inversión utilizado por la compañía de David Wigoda en sus tiempos de auge. Según ellos, aunque Acción Fiduciaria se ha declarado protector de los intereses de sus 1.172 clientes defraudados y no niega las obligaciones, a última hora les bloquea los acuerdos de pago. Por ahora solo el Grupo Monarca ha llegado a acuerdos con los damnificados y está a punto de darles una participación efectiva en sus proyectos inmobiliarios.

EEB: jugada a tres bandas

Una discusión jurídica se ha abierto frente a la posibilidad de que la Empresa de Energía de Bogotá (EEB) compita en la privatización de Isagen. EEB tiene 51% de Emgesa, una de las generadoras más grandes del país con más de 20% de la capacidad instalada. El tope es de 25% y, por esa razón el Gobierno ha manifestado que Emgesa no podría participar. Sin embargo, EEB al parecer sí lo puede hacer pues, pese a ser el accionista mayoritario, el control de Emgesa lo tiene Endesa, su casa matriz. Así, EEB podría hacer moñona: quedarse con importantes participaciones en dos de las generadoras más grandes del país y metérsele al rancho a EPM en Antioquia.

Apuesta por el peso

Pese a la reciente devaluación del peso frente al dólar, que en lo corrido del año alcanza 9,4%, el banco estadounidense Everbank acaba de lanzar unos certificados de depósito, basados en las monedas de lo que denominan las economías en evolución, es decir, Colombia, Turquía, India y México. Estos certificados están dirigidos a inversionistas con interés en el mercado emergente, pero que toleran poco riesgo. Para el banco, Colombia y Turquía tienden a ser pasados por alto por el inversionista promedio, pero son una buena oportunidad pues no están agobiados por una deuda excesiva.

Con hermanos africanos

La chilena CFR Pharmaceuticals SA, la mayor productora de medicinas de su país y dueña de Lafrancol, planea comprar la sudafricana Adcock Ingram Holdings, por US$1.256 millones, más del doble de los US$560 millones que pagó por el laboratorio colombiano. De hecho, Lafrancol se convirtió en la mayor operación de CFR Pharmaceuticals al aportarle 29% de sus ingresos en los primeros seis meses de este año, mientras su negocio chileno le abona 23%. Una de las enfermedades de mayor impacto en África es el Sida, donde Adcock es fuerte en los tratamientos que ofrece.

Mundial servirá de anzuelo

A pesar que los juegos de suerte y azar mueven en Colombia más de $2,5 billones, el mercado cuenta con pocos productos, es por esto, que Coljuegos prepara una serie de productos para este sector en el país. Uno de ellos es las apuestas deportivas, que tendrá como gancho el Mundial que se llevará a cabo en Brasil durante el 2014. La estructura del juego aún está en estudio. También se planea lanzar las loterías instantáneas, una especie de ‘raspe y gane’ y las apuestas on line.

No, por ahora

En la junta del Banco de la República del pasado 30 de agosto, una de las principales discusiones se centró en si era el momento de bajar las tasas de interés. La iniciativa la llevó Mauricio Cárdenas, ministro de Hacienda, pues el Gobierno ha visto una desaceleración en la economía, combinada con paros y protestas. La idea del Gobierno es dar señales para que el consumo no se enfríe. A pesar del interés del Ministro, la propuesta fue derrotada al interior de la junta y las tasas se mantuvieron inalteradas. Sin embargo, Cárdenas no se dará por vencido y volverá a poner el tema sobre la mesa en la próxima junta y, en ese momento, espera ganar el pulso.

Nuevo hotel

Con una inversión de $9.000 millones la cadena de hoteles Estelar, inauguro oficialmente su primer hotel en la capital santandereana “Estelar Apartamentos Bucaramanga”, un edificio de 17 pisos. El hotel cuenta con 29 apartaestudios de dos y tres habitaciones tipo superior, superior estelar y aparta suite, completamente dotados. Al frente dela Gerencia se encuentra Carlos Alberto Ruiz Gómez, Contador Público, egresado de la Corporación Universitaria Rafael Núñez de Cartagena, Profesional del Colegio Mayor de Bolívar; con más de 15 años de trayectoria con Hoteles Estelar desempeñándose en diferentes cargos entre otros, en el departamento de habitaciones, alimentos y bebidas, y administrando propiedad horizontal .Tendrá a su cargo 25 empleados.

JUAN-

(Una producción del Colectivo Mambrú para el Diario Digital EJE 21)

¿Cuáles son las reformas?

Una afirmación del presidente Santos al anunciar la recomposición de su gabinete ministerial, pasó inadvertida para la mayoría, no obstante la trascendencia que encierra.

Dirigiéndose al nuevo ministro de Agricultura, Rubén Darío Lizarralde, el Jefe del Estado le dijo: “Le corresponderá igualmente poner en marcha las reformas que ya hemos acordado en La Habana en materia de desarrollo rural ”.

Muchos se preguntan cuáles son esas reformas “que ya hemos acordado en La Habana”, porque hasta el momento no ha trascendido absolutamente nada al respecto.

Y agregó el Presidente: ”En los próximos diez años tenemos que sacar adelante lo que no hicimos en los últimos ochenta años, en una verdadera revolución agraria”.

Será que se le informará al país, con pelos y señales, y sobre todo con veracidad y oportunidad, cuáles son “las reformas que ya hemos acordado en La Habana ?”. Tiene la palabra, Señor  Presidente.

Un ministro tirapiedra

Cómo iba a pensar hace casi cincuenta años el hoy flamante ministro de Minas y Energía, Amilkar Acosta, que una serie de  pedreas como las que él alentaba cuando era estudiante, lo iban a llevar a integrar un gabinete ministerial.

Porque la verdad es que la reintegración del equipo ministerial del presidente Santos, en buena medida estuvo motivado por la grave crisis que debió soportar en las pasadas semanas, signadas por los peores desórdenes de los últimos años en los cuales las pedreas fueron el pan de muchos días.

Acosta, como presidente del consejo estudiantil de la Universidad de Antioquia, donde cursaba economía, se distinguió por su beligerancia y su participación activa en cuanto enfrentamiento alumnos-policía había durante los frecuentes paros que entorpecían las actividades en el Alma Mater.

Otros dos líderes “revolucionarios” de esa época agitada que llegaron a altas posiciones, son el actual rector de la Universidad Autónoma Latinoamericana, Rodrigo Flórez y su compañero de andanzas, Luis Fernando Montaño, quien llegó a juez.

Un gran damnificado

Aunque muchos lo pongan en duda, uno de los grandes damnificados ante la difícil situación por la que atraviesa el ex gobernador Luis Alfredo Ramos, es el ex alcalde y miembro del partido liberal, Luis Pérez Gutiérrez.

Sucede que la yunta para las elecciones regionales de 2015 – renovación de gobernaciones y alcaldías – era la de Ramos Botero, casi fijo para la alcaldía de Medellín, y Pérez Gutiérrez como candidato a la gobernación de Antioquia.

El futuro ya no será el mismo sea cual sea la suerte final del ex mandatario antioqueño con la Corte Suprema de Justicia, y por ende, para quienes iban detrás de él y de su maquinaria electoral.

Queda una duda: Si Ramos finalmente no va como candidato a la alcaldía y su suerte no es la mejor, quién de Pérez Gutiérrez y de Liliana Rendón asumirá la candidatura a la gobernación?  Por votos, por capacidades, por maquinaria y por antecedentes, parece obvio que sería el ex alcalde de Medellín. Pero por ahora, la situación aparece bastante complicada.

Pidiendo explicaciones

El caso del ex gobernador de Antioquia, Luis Alfredo Ramos, le sirvió al ex uribista Gabriel Silva, para volver a poner banderillas negras a su ex patrón, Alvaro Uribe.

En el epígrafe con el que suele terminar su columna semanal en el periódico El Tiempo, Gabriel Silva aprovechó la coyuntura sobre el nuevo escándalo, para preguntar: “Y a todas estas, ¿dónde están las explicaciones del ex presidente Alvaro Uribe sobre tantos y tantos de sus amigos cuestionados por la justicia ?”

Silva parece que se quedará mucho rato esperando las explicaciones solicitadas a su ex jefe.

¿A quiénes se refería?

Esa es la pregunta que algunos se hacen acerca de la afirmación que consignó Luis Alfredo Ramos, en un comunicado que dio a conocer el pasado miércoles, en vísperas de que le fuera dictada la medida de aseguramiento por la Corte Suprema.

El ex gobernador sostuvo que “si escuchar delincuentes con el propósito de que dejen de delinquir es un delito, no solamente los guerrilleros sino también los negociadores del gobierno que hoy se encuentran en La Habana, tendrían que pasar de la mesa de negociación a la cárcel”.

Lo de los subversivos se entiende, pues al fin y al cabo han delinquido de mil maneras, pero cuales de los negociadores – según Ramos – tendrían que pasar a la cárcel ? De La Calle Lombana, o Luis Carlos Villegas; o el general Mora Rangel o Sergio Jaramillo ?

No sobraría una aclaración de Ramos Botero sobre el asunto

Con lupa y mira telescópica

Ahora que avanza el proceso de confeccionar listas de candidatos al senado y la cámara de representantes para las elecciones de marzo próximo, todos los grupos y movimientos se cuidan bastante en la selección de quienes van a integrarlas.

Lo anterior en razón de la susceptibilidad y suspicacia reinantes en todas las esferas, ante la posible infiltración  en esas listas de personas con pasado no perfectamente limpio, o al menos sospechoso.

Posibles lavados de dinero, contratistas expertos en el “cvy”, supuestas vinculaciones con organizaciones delictivas de todos los pelambres y otra serie de conductas que pondrían al candidato en entredicho, están siendo analizadas y estudiadas para no incurrir en errores garrafales.

Esa detallada inspección se hace no sólo en Colombia sino que también se está mirando al exterior, especialmente a los Estados Unidos, donde según dicen conocedores, hay mucha tela de donde cortar.

Las encuestas a boca de jarro

Si a usted que regresa del cementerio donde acaba de enterrar a su señora madre, un encuestador le pregunta cómo se siente, lo más seguro es que usted sintetice la respuesta y le diga: Destrozado.

Mil hijos responderían lo mismo y mil colombianos, que a mañana, tarde y noche que sólo tenían la imagen del paro, el desabastecimiento y las pedreas, obligatoriamente debían responder también como el afligido hijo huérfano si les interrogaban en esos momentos sobre el presidente Santos y su gobierno.

Con razón ese bajonazo increíble en la imagen del primer mandatario, quien por lo bajo se equiparó con el más incapaz de todos los últimos presidentes: Andrés Pastrana.

Si la firma Gallup perteneciera al ex presidente Uribe o a cualquiera de sus más fieles seguidores, no habría hecho mejor la tarea de dejar en los físicos cueros al Jefe del Estado, quien a esta hora parece tener bastante embolatada su reelección.

El último parto ministerial de Santos

Esta es la última cochada ministerial del Presidente Santos para los once meses que restan de su mandato constitucional:

En el Ministerio de Justicia estará Alfonso Gómez Méndez.

Irá al  Ministerio de Ambiente Luz Elena Sarmiento.

Despachará en el Ministerio del Interior Aurelio Iragorri Valencia.

Atenderá en el Ministerio de Agricultura  Rubén Darío Lizarralde.

Ingresará al Ministerio de Minas y Energía Amilkar Acosta Medina.

Asumirá en Planeación Nacional Tatiana Orozco.

En la secretaría general de la Presidencia se desempeñará María Lorena Gutiérrez.

Unos brochazos del barquero Calderón

Después de haberse preparado toda la vida para ser algún día Ministro de Justicia llega por fin al alto cargo el jurista tolimense Alfonso Gómez Méndez, quien lamenta para sus adentros  que solo sea por unos once meses.  La verdad monda y lironda es que no tendrá tiempo ni para una reforma judicial grande, ni mediana ni pequeña. En su Chaparral natal --donde lo apodaron “El mosco” desde los bancos escolares— deben estar de fiesta con su ministerio. Por lo pronto, le toca poner su pluma en remojo como columnista de El Tiempo.

Pacho El Breve

Francisco Estupiñán se convirtió desde la noche del jueves en el más breve de todos los ministros de agricultura que ha tenido  Colombia. Salió de la apetecida cartera tres meses después de haberla asumido. Pagó un precio muy alto  por el largo paro agrario. Nunca debió aceptar el tránsito de la presidencia del Banco Agrario al Ministerio en el que estuvo hasta cuando quiso el versátil Juan Camilo Restrepo. Al doctor Pacho lo reemplaza Rubén Dario Lizarralde. ¿Será posible que lo devuelvan al Banco Agrario, donde lo venía haciendo muy bien?

Otros rollos ministeriales de William

El heredero.- Prosigue en veloz carrera, en las grandes ligas de la burocracia santista, el joven Aurelio Iragorri Valencia. El representante de los heliotropos caucanos comenzó como viceministro del Interior. Pasó después a la secretaría general de la Casa de Nariño y acaba de ser nombrado Ministro del Interior, en sustitución de Fernando Carrillo, quien hace algún tiempo fue su jefe. En la secretaría general de la Presidencia lo remplaza María Lorena Gutiérrez

Nos devuelven a Juan Gabriel. Después de haber realizado una magnífica gestión al frente del Ministerio de Ambiente, el alto gobierno nos devuelve a nuestro director Juan Gabriel Uribe. Lo sucederá Luz Elena Sarmiento. Bienvenido a su casa de El Nuevo Siglo, doctor Uribe. 

Los inamovibles. Se confirmó que es inamovible la tripleta ministerial integrada por Juan Carlos Pinzón, en Defensa; Mauricio Cárdenas, en Hacienda, y Maria Angela Holguín, en Relaciones.

Un adulto responsable

Resulta muy divertida la promoción que difunde el Canal Caracol para su nueva temporada del Festival internacional del humor:

Le pregunta Tola a su inseparable compañera de paraguas:

0iste, Maruja, a vos te gustaría que Pachito Santos fuera el nuevo presidente de Colombia?

La respuesta: “Sí, Tola, pero siempre y cuando esté acompañado por un adulto responsable”… 

Descubriendo que el agua moja

El cronista político del periódico El Mundo publicó el pasado jueves  como gran novedad una declaración del político liberal Carlos Arturo Piedrahita, en el sentido de que a quien sea elegido y no se posesione, se le aplicará la pérdida de investidura, según determinación del Consejo de Estado.

Ese no es ningún descubrimiento pues está consagrada la norma, como ya lo anunció Juan Guerra en ediciones pasadas, en el artículo 183 de la Constitución. Los congresistas perderán su investidura, dice esa norma “por no tomar posesión del cargo dentro de los ocho días siguientes a la fecha de instalación de las cámaras”…

Lo de Piedrahita fue interpretado por algunos como una advertencia al ex presidente Uribe, a quien algunos quieren utilizar como mascarón de proa para arrastrar votos, pero sin que el llegue a posesionarse si es elegido.

Juan Guerra ya ha anticipado que si Uribe se lanza al senado y es elegido, tendrá que posesionarse y someterse al enfrentamiento que seguramente muchos estarán esperando con inusitado deleite.

¿Víctima del sapo o del himno?

Renunció Selene Botero a la gerencia de Teleantioquia y todavía no se sabe a ciencia cierta si su dimisión fue “por motivos personales”, como lo consignó en su carta, o se debió a una comedida sugerencia del gobernador Sergio Fajardo.

En las mismas esferas del gobierno departamental no creen que esa dimisión haya sido para buscar nuevos aires y oportunidades, sino que en ella tuvieron que ver, o el periodista sapo que hizo la clandestina grabación de un consejo de redacción, o el esperpento en que quedó convertido el “arreglo” del himno antioqueño.

Esta es la hora en que no hay humo blanco alrededor de la “exhaustiva” investigación por el vergonzoso episodio del infiltrado consejo de redacción, aunque se haya dicho desde el principio del escándalo que se llevaría la averiguación hasta las últimas consecuencias.

Y en lo que toca con el himno, nadie cree en el departamento que semejante bodrio que costó casi trescientos millones de pesos, haya sido iniciativa solamente de Selene. Pero como siempre la cuerda se rompe por lo más delgado…

No encontró delito

La Contraloría General de Antioquia dijo que no había encontrado delito en el sonado caso de la emisión de bonos que hizo el departamento en cuantía de trescientos mil millones de pesos, caso en el cual se vio involucrado Juan Esteban Toro Valencia, quien fungió como asesor de la secretaría de hacienda mientras simultáneamente trabajaba en el Bancolombia.

Esta entidad fue finalmente la beneficiada con el manejo de esos bonos, en un hecho que varios diputados consideraron, si no ilegal, por lo menos indecente y anti ético.

La agencia fiscal del departamento mencionó sobre este caso, el hallazgo de una presunta incidencia disciplinaria, y de ella dio traslado a la Procuraduría General de la Nación.

Vistas las cosas desapasionadamente, en esta caso les ganó el gobernador Fajardo a sus enconados opositores, los diputados Juan Esteban Villegas y Adolfo León Palacio, el mismo a quien el Espíritu Santo le hizo llegar a su curul la grabación clandestina del consejo de redacción de Teleantioquia.

Esta injusta justicia

Por hurto agravado y calificado, el robo de un bolso a una dama, dos hombres de 18 y 20 años de edad fueron condenados a cuatro años de prisión por el  juzgado segundo de conocimiento de Bogotá.

Los culpables, dijo el juez, “aprovecharon la soledad y la oscuridad del sector y la despojaron de sus pertenencias, con el agravante de que ejercieron violencia sobre ella y su acompañante”.

Contrasta esta ejemplar condena con lo que sucede alrededor de los caballeros de industria y delincuentes de cuello blanco, quienes después de apoderarse de miles de millones de pesos, también aprovechando la falta de normas severas y de claridad en el sector financiero y en el oficial, siguen campantes y en pleno disfrute de lo mal habido.

Otros esquivan con miles de esguinces el peso de la justicia (¿) y esperan sin inmutarse las preclusiones, los vencimientos de términos, el  habeas corpus y otras triquiñuelas, ante el estupor de las gentes de bien.

Colombia pierde liderazgo en el mercado mundial de esmeraldas

Luis Gabriel Angarita, presidente de la Asociación Colombiana de Exportadores de Esmeraldas (Acodes), reveló que nuestro país en los últimos años ha perdido terreno en el mercado mundial de las esmeraldas, debido a los procesos de industrialización y avances tecnológicos de naciones como Brasil y “al deterioro en la producción nacional e ingreso de piedras de color de otras regiones”.

En ese sentido, Acodes, Fedesmeraldas y el Gobierno Nacional son conscientes que debe existir un trabajo aunado que permita el aprovechamiento de la promoción del producto en el exterior, razón  por la cual participarán en el Hong Kong Jewellery Show Internacional, la feria más importante del mundo enlal que los visitantes, en su mayoría joyeros, buscan los proveedores de calidad para la comercialización de sus productos.

Con representantes ajenos

Angarita, precisó que “Colombia no participaba de manera directa en estos eventos, ya que la presencia del país se hacía a través de empresas foráneas. Hoy día lo hacemos como gremio y en representación de una de las naciones más apetecidas por la producción y calidad de su esmeralda. Aunque la producción ha disminuido un poco, lo que queremos con el Gobierno es recuperar el 55% del mercado que antes era de Colombia y que ahora es de otros países”.

Actualmente, el país tiene el 33% del mercado mundial. Por ello, con la promoción en importantes eventos como el Hong Kong Jewellery Show Internacional, “queremos reposicionar al país y darle la relevancia que tenía en los mercados internacionales y donde más se consume el producto, mediante la unión de empresas nacionales que permitan el realce de la calidad de la esmeralda colombiana, ya que en Colombia, las ventas de esmeraldas no representa ni el 5% de la comercialización total del mundo”.

Unas fieras para las matemátícas

El mismo día que se juramentaba como nuevo gobernador de Caldas el ingeniero Julián Gutiérrez Botero, unos manizaleños inconformes con su elección ponían en circulación los resultados de un extravagante escrutinio bien particular, carente de Registrador y de Consejo Electoral:

Juliàn Gutièrrez Botero se posesiona como Gobernador de Caldas con 105. 309 votos. Pero no votaron por Juliàn:

71. 250 ciudadanos que votaron por Augusto Leôn Restrepo… 7.995 ciudadanos que votaron por Eugenio Marulanda… 22.588 ciudadanos que  votaron en blanco… 10.570 ciudadanos que no supieron votar o votaron adrede para que se anulara su sufragio. ¿voto Protesta?) … No votaron por Julián   114.697 caldenses.

Las cuentas claras, como el chocolate

Los anónimos discípulos de Pitágoras redondeaban su ejercicio con este interrogante: ¿Juliàn tiene legitimidad  para gobernarnos, con un setenta por ciento de abstención y apenas un 15 % a su favor?

¿Cambio de rumbo?

En estos comicios quedó definido, aparentemente, un cambio de rumbo para el otrora departamento modelo de Colombia. Pues bien, qué bueno sería que esta novedad trajera consigo una modificación en la manera de pensar, actuar y defender lo propio por parte de los caldenses. No puede ser que la indolencia de todo un pueblo permita  y acepte las cosas que pasan en la tierra de nuestros mayores.

¿Si hay dramaturgia colombiana? 

Responde la dama bogotana Helena Manrique Romero, permanente colaboradora de Juan Guerra:

Los noveles actores colombianos se quejan, porque no encuentran dramaturgia colombiana para llevar a la escena. El cofundador del otrora TPB, (Teatro Popular de Bogotá), actor, dramaturgo y director boyacense, nacido en Tunja 1937, Luis Alberto García Jiménez, pone a disposición 32 nuevas piezas de teatro. García es autor de una de las diez obras de teatro más importantes en Colombia, I Took Panamá 1975, Yo tomé Panamá, pieza inspirada en las palabras pronunciadas por el presidente de Estados Unidos Theodore Roosevelt, días después del 3 de noviembre de 1903, cuando perdimos a Panamá, durante el mandato del conservador José Manuel Marroquín (1900-1904). Otros títulos de García: Toma tu lanza Sintana, El sueño de Gettysburg, Los caballeros del Dorado, La viuda del celador, Vivir en paz, La ópera de tres gramos, La Gaitana, Gaitán, Adiós para siempre, Catalina Bardo, Las nueve estaciones o los derechos del hombre, esta última montada por Bataklán Teatro. García, egresado de la Universidad Nacional de Bogotá en Filosofía y Letras, inició su labor actoral con el grupo El Búho. Actores de Colombia: sí hay obras de teatro nacionales para futuros montajes, hay que buscarlas. Esperamos que las editoriales consideren la labor, el talento y el esfuerzo del dramaturgo García, y proporcionen los respectivos recursos para editar nuevos títulos, en pro de las tablas colombianas y extranjeras. (Helena Manrique Romero, de Bogotá).

 

La Retaguardia

Los periódicos Vanguardia Valledupar y Q´Hubo, anunciaron el pasado 31 de agosto,  a través de su editorial, el cierre definitivo de sus publicaciones: “Hoy, situaciones ajenas a nuestra voluntad nos llevan a terminar nuestra operación en el Cesar”.  Con esta determinación, sólo quedan en circulación  los diarios El Pilón y Al Día.

Vanguardia existía en la región hace 12 años y Q´Hubo llevaba  6. Esta decisión, que al parecer obedece a falta de viabilidad financiera, deja sin empleo a 42 personas, pertencientes a las áreas de redacción, administración, publicidad y circulación. En redacción, Vanguardia tenía  9 periodistas, dos reporteros gráficos y un diagramador; Q’hubo contaba con 5 profesionales de la Comunicación Social.

Adriana Hurtado, presidenta de la Fecolper, expresó su solidaridad a los trabajadores afectados, así como al departamento que pierde dos medios de comunicación, y dijo que esta situación se convierte en un golpe para la libertad de expresión en una de las regiones más afectadas por el desempleo, la pobreza y el conflicto armado

EL REVERBERO DE JUAN PAZ

Publicación exclusiva de El Centinela News

Lo tumbaron del Metro

Desde hace varias semanas vienen presionando al Presidente Santos por un cambio en la gerencia del Metro, especialmente el Partido de la U, que en Antioquia agencian el senador Omar Hoyos y el representante Augusto Posada. Su candidato era el exviceministro Juan Camilo Restrepo Gómez. El Reverbero de Juan Paz conoció que el Presidente estaba dispuesto a nombrarlo, pero se atravesó Nicanor Restrepo Santamaría.

Fue una argumentación lógica e irrefutable: Que el hombre no tiene experiencia administrativa, ni recorrido empresarial, que no sabe leer un balance y que la situación financiera del Metro no está como para exponer la empresa al juego de las ambiciones políticas. Juan Camilo quedó liquidado.

El Reverbero también conoció que el candidato del gobernador Fajardo era Mauricio Valencia, su secretario de Infraestructura. Pero igual, un joven sin experiencia alguna. Total, que salió fortalecido el actual gerente Ramiro Márquez, quien seguirá en la gerencia del Metro hasta el final de este Gobierno.

Un golpe al alma de Santos

El resultado de la encuesta de Invamer Gallup cayó como una bomba atómica en Palacio. Por la seriedad y rigurosidad de la firma, y porque Jorge Londoño De la Cuesta la viene haciendo bimensual desde 1994. Pero lo que más preocupa en Palacio es que la debilidad de la figura del Presidente, con una imagen negativa del 72%, lo vuelve vulnerable frente a los congresistas, los empresarios, los sindicatos y a los grupos de presión que adelantan protestas en el país en este momento.

Un alto costo

Una fuente de Palacio le comentó a El Reverbero de Juan Paz que los resultados de esta encuesta tendrán unos costos muy elevados. - “Los congresistas cobran por ventanilla. ¿Cuánto costará la reforma a la salud y la aprobación el presupuesto? Y en la misma proporción que perdió Santos, ganó el sector santista del Sindicato Antioqueño que cada día adquiere más ascendencia en el Gobierno… Así se mueve la lógica del poder.

El Plan “V”

Desde hace una semana se comentaba en círculos empresariales, que los resultados de la encuesta bimensual de Invamer Gallup serían desastrosos para el Gobierno. El Reverbero de Juan Paz asistió la semana pasada a un almuerzo en el Club Campestre. Un alto ejecutivo del Sindicato Antioqueño, santista por demás, dijo que tenía indicios de que la imagen negativa de Santos iba a ser tan alta, que obligaría a los asesores de Palacio a pensar en el Plan “V”: Vargas.

Aunque se argumenta que la encuesta es una foto del momento que vivía el país por el paro agrario, recuperar una imagen negativa del 72% en ocho meses, antes de la primera vuelta en marzo, es casi una misión imposible, dicen los expertos. Un senador afecto al Gobierno defendió al Presidente, pero dijo que “Santos pagó alto el precio de no haber hecho los cambios ministeriales hace dos meses, pensando en los problemas anunciados. Es posible que ya no pueda recuperar el tiempo perdido…”

De labios para afuera…

En el cuadro de positivos y negativos, los únicos cercanos al Gobierno que se salvan son el vicepresidente Angelino Garzón con el 68% y Germán Vargas con el 56%. Y como Navarro repuntó con un sorprendente 50%, el celular del exministro Vargas ha comenzado a sonar nuevamente con insistencia. Y cada que lo contesta vuelve a escuchar los cantos de sirena: - ¡Germán, ahora o nunca!

¿Gabinete de reelección?

Antes que el gabinete presentara en pleno su renuncia protocolaria, fueron muchas las consultas que realizó el Presidente, especialmente con Germán Vargas Lleras, Carlos Urrutia y Juan Manuel Prieto, entre otros amigos. Santos escuchó además el consejo de varios de sus analistas, con base en lo que estaba sucediendo en el país, pues quedaba demostrado que sus ministros no conocen las regiones, son distantes de la gente, burócratas, de estrato doce… Ahora Santos le da un toque más regional a su gabinete.

Las presiones azules

La coyuntura del tremendo bajón de Santos en las encuestas, no se veía algo así desde el gobierno de Andrés Pastrana, ha sido aprovechada por el Partido Conservador, que viene presionando en las dos últimas semanas con persistencia de ir con candidato propio a las elecciones presidenciales. En el espacio del PC en televisión, su presidente Omar Yepes Alzate ha venido reivindicando la vocación de poder del Partido azul.

Sin embargo, algunos senadores le comentaron a El Reverbero de Juan Paz que los conservadores buscan presionar al Presidente con el fin de lograr una mayor participación en el Gobierno. Es tal el desespero, que esta semana se les vio a los congresistas azulejos abiertamente enfrentados en el tema del referendo. Otro senador comentó: - “Si el PC va a elecciones con candidato propio o no, lo define Santos con oxígeno…” Aunque en el retoque del gabinete no les fue como lo esperaban.

Fajardo otra vez en Procuraduría

Tremendo golpe recibió el gobernador Fajardo con el informe de la Contraloría de Antioquia, sobre la auditoría exprés a la Secretaría de Hacienda, relacionado con el contrato de emisión de bonos de deuda pública por $300 mil millones y la reestructuración de los créditos del Departamento por $100 mil millones. La Contraloría  no encontró daño patrimonial en las finanzas de Antioquia.

Sin embargo dice que encontró una presunta incidencia disciplinaria, “por la permanencia de un funcionario de Bancolombia, el señor Juan Esteban Toro Valencia, con cédula de ciudadanía 3.3.83.550 de Envigado, el cual según certificación de la Secretaría de Hacienda Departamental, estuvo desde el 21 de mayo hasta el 15 de diciembre de 2012 prestando una asesoría técnica, en temas, entre otros, de reestructuración de deuda y de emisión de bonos. Por tanto se le dará traslado a la Procuraduría General de la Nación, para lo de su competencia”.

Largo ocultamiento

Del comunicado de la Contraloría General de Antioquia y de la denuncia de la Asamblea se desprenden dos detalles. Según la Contraloría, Juan Esteban Toro Valencia, el asesor de Bancolombia, estuvo “camuflado” en Hacienda desde el 21 de mayo hasta el 15 de diciembre de 2012. Y la Asamblea dice que apenas se enteró en julio de 2013. Lo cual quiere decir que la secretaria de Hacienda, María Eugenia Escobar, le ocultó a la Asamblea esa información durante 15 meses.

¿A espaldas de los jefes?

De esta conclusión de la Contraloría General de Antioquia se desprenden varias inquietudes lógicas, que se pregunta la gente del común: ¿Un negocio de esta dimensión se puede hacer a espaldas del gobernador Fajardo? ¿Y es posible que Bancolombia tenga un asesor “anónimo” con toda el alma en la Secretaría de Hacienda, en un negocio multimillonario sin que sepa su presidente Carlos Raúl Yepes?

Otro elefante…

Parodiando el Proceso 8000, al igual que Santiago Medina y Fernando Botero Zea ingresaron miles de millones de pesos a la campaña Samper Presidente, se podría decir entonces que María Eugenia Escobar llevó ese elefante desde la Avenida Las vegas hasta La Alpujarra, sin que nadie la viera... ¡El elefante de Bancolombia en La Alpujarra!

Y en las redes sociales están sugiriendo que así como el presidente de Bancolombia, Carlos Raúl Yepes, planteó un problema ético empresarial con el caso de las neveras del Éxito por un error de dedo, debería ceder que se barajara de nuevo el multimillonario negocio con el Departamento, en un claro juego limpio frente a los demás bancos que no jugaron en igualdad de condiciones en este negocio. Esa sí sería una contundente demostración de ética bancaria y empresarial, comentan.

En todo caso la Procuraduría General tiene la palabra en este otro caso que revela la poca transparencia del gobierno de Fajardo y que pinta ser más grave que el del contrato minero que firmó con Manuel Antonio Mesa, esposo de su exfuncionaria estrella Beatriz White. Por la sencilla razón de que Fajardo recibió de Bancolombia un crédito por $400 millones y una donación de $40 millones para su campaña hacia la Gobernación. Y ahora lo favorece con contratos. ¡Transparente! Más claro no canta un gallo.

Por ventanilla

El viernes en la mañana el gobernador Fajardo invitó al presidente de la Asamblea, Jaime Cano, para que lo acompañara a una reunión con los voceros del movimiento de los mineros. Cano se llevó a su colega Adolfo León Palacio, quien fue clave en la denuncia de los negocios entre la Gobernación y Bancolombia. Cuando llegaron al piso doce, devolvieron al diputado Palacio. No lo dejaron entra al despacho del gobernador.  Palacio no necesitó preguntar por qué…

Daniel se destapa

El columnista Daniel Samper Pizano se destapó con Edgar Artunduaga. En una ágil y amena entrevista, habló de todo. Vean lo que piensa de ver a dos Santos compitiendo por la Presidencia de la República:

-         “Es una caricatura y demuestra lo que es Colombia, un país manejado por una oligarquía. La oligarquía más hábil que otra, que hace algunas cosas bien y otras, bastante mal. Pero es una oligarquía. Cuando uno llega al punto en que la solución está entre escoger a un Santos Calderón o a otro Santos Calderón, lo que está es mostrando cómo las decisiones, no las soluciones, sino los pasos que haya que tomar los ha de tomar siempre y los sigue tomando una pequeña oligarquía. Cuando digo pequeña oligarquía sé que es una redundancia. Pero es un gobierno de unos pocos, el gobierno de los que siempre han estado mandando en Colombia y los que han tenido acceso a la parte dura del poder”

-         ¿Piensa, como el Presidente, que sería un chiste un país manejado por Pacho Santos?

-         “A Pacho le tengo mucho aprecio personal y como colega. Somos además ambos fanáticos de Santa Fe, pero me parece un despropósito tremendo que se pueda pensar que Pacho Santos puede ser Presidente de Colombia, como si lo dijera de mí mismo. Si el candidato fuera yo, diría, están absolutamente locos. Pacho es una muy buena persona, es un muy buen periodista, pero por Dios, pasar de ahí a poner en sus manos el país es una locura”. Léala completa en

El hijo de Piedad

Juan Luis Castro, el hijo mayor de la senadora Piedad Córdoba, busca curul en el Senado. Es psiquiatra. En el 2000 dejó su país natal, Colombia, y se fue a Canadá donde realizó tres años de investigación en psiquiatría cultural y social. En Nueva York inició sus estudios de especialización en psiquiatría clínica en la Universidad Monte Sinaí. Actualmente, es miembro de la Asociación de Psiquiatría estadounidense y trabaja como psiquiatra infantil en los Estados Unidos.

Su mamá Piedad viene impulsando su campaña al Senado por el Partido Liberal. El joven siquiatra ya ha participado en varios diálogos nacionales. Es estudioso y serio. El sábado pasado en lo que era la sede del Club Medellín, Piedad Córdoba presentó oficialmente la candidatura de su hijo. Pero como a Piedad no le faltan sus críticos, andaban cuestionando que la integrante de Marcha Patriótica también se presente como liberal, pues siempre pretende estar por todos y por todas…

¿Cuál alianza?

Hasta los más cercanos amigos del alcalde Gaviria y del gobernador Fajardo reconocen que la alianza AMA si existe, pero que  subsiste por conveniencias políticas. Pero es muy endeble. Entre Gaviria y Fajardo hay mutuo respeto, pero de ellos para abajo sus inmediatos colaboradores hablan mal unos de otros. Hablan mal no, hablan pestes… No hay relación alguna. Y establecen una diferencia muy grande entre la frescura de Aníbal y la soberbia inocultable de Fajardo.

A fuego leeento…

·       La exdirectora de El Colombiano, Ana Mercedes Gómez, afirmó en su columna que prefiere de Presidente al ministro de la Defensa, Juan Carlos Pinzón, porque éste no le teme cantarles la tabla a los terroristas de las Farc. Porque a Santos le da miedo pronunciar su santo nombre…

·       Ya le van a echar toda la culpa a la secretaria de Hacienda del Departamento, María Eugenia Escobar, del negocio con Bancolombia a espaldas de la Asamblea y de la comunidad…

·       Claro, para salvar a Fajardo de otro rollo en la Procuraduría, que va en contra de su discurso sobre la transparencia… Pero ella no fue la beneficiada con los préstamos y donaciones de Bancolombia.

·       Muy mal cayó en Palacio la recomendación de Fajardo al presidente Santos: que cogiera el toro por los cuernos. A los palaciegos asesores del estrato doce del Gobierno, no les gusta que les alcen la voz desde la provincia. Y menos un gobernador con pretensiones presidenciales.

·       Pero es que a alcaldes y gobernadores no les gustó que el Presidente les echara el agua sucia de las protestas sociales, porque las causas justas nacieron en Bogotá.

·       En la baranda judicial bogotana se comenta que se vienen durísimas decisiones contra uribistas de racamandaca…

·        Y que  la Corte Suprema indaga sobre otras reuniones de políticos en Antioquia, contadas por otros criminales… La Corte presionada y presa del cartel de los testigos…

·       El Presidente Santos dijo en Cartagena que no le preocupan las encuestas, porque está haciendo las cosas bien. ¿Acaso las encuestas no reflejan lo que piensa la gente de si el Presidente está haciendo las cosas bien?

Julito lo soltó al aire

El tema de Sucre y la renovación del contrato del chance a la familia de Enilse López, alias “La gata”, condenado a 37 años de cárcel por la Corte Suprema de Justicia, tiene caliente al país. Pues bien, Julito Sánchez entrevistó a Simón Gaviria, director del liberalismo, sobre el respaldo del Partido al gobernador de Sucre Julio César Guerra Tulena, quien bordea los 80 años. Cuando Gaviria dijo que Guerra Tulena representa la renovación liberal, Julito le ripostó al aire: - “Déjeme esa perla ahí, yo mejor me retiro de esta entrevista…” Y dejó a Simón Gaviria en manos de Camila. ¿Qué tal?

Coqueteos a Eugenio

Le siguen hablando por un oído al senador Eugenio Prieto: Que no aspire al Senado y que piense en una elección regional para Alcaldía o Gobernación. Inclusive le comentan que la situación de Ramos lo deja en posición privilegiada para ambos cargos. Pero por el otro le dicen que esa propuesta es para tirarle un salvavidas electoral a Sofía Gaviria, debido a que el candidato fuerte para la Gobernación es Carlos Mario Montoya. Hasta el momento Eugenio se mantiene firme en buscar su reelección al Senado. Pero le siguen coqueteando.

Lo dijeron en voz baja…

Estaban conversando un polémico exmagistrado de la Corte Suprema de Justicia y un senador conservador en un ascensor. Vean la frase que soltó el extogado: - “Lo de Luis Alfredo era una medida cantada. El no podía arriesgarse a que no le removieran en Contraloría, Fiscalía y Corte si se lanzaba como candidato a la Presidencia”. Y respondió el senador: - “Sus enemigos están dentro del Partido conservador y dentro del santismo. Frenarlo a él, es frenar el tránsito de los conservadores hacia Uribe y aliviar la pesada carga negativa que tendría Santos, quien insistirá en su reelección”.

Pero vean la pregunta que soltó este exmagistrado: - ¿Si la Corte no está politizada y el proceso de Ramos es el mismo de Oscar Suárez, por qué la Corte no los llamó a ambos al mismo tiempo? Dicen que la política puede con todo. Ahora quieren aprovechar la difícil situación por la que atraviesa Ramos, para cobrárselas a otros dirigentes conservadores. En la famosa reunión de Bello, en la que se pretende inculpar a los congresistas conservadores antioqueños, no aparece el nombre del parlamentario andino Oscar Arboleda y los testigos tampoco lo han mencionado.

¡De viceministro!   

¿Se acuerdan que el Reverbero de Juan Paz les había comentado que la pataleta del expresidente Pastrana contra el presidente Santos, Samper y Serpa por el Proceso 8000, se debía a que el hijo del expresidente iba a ser nombrado ministro de Justicia, y no su hijo Santiago?

Pues ahí tienen a Miguel Samper Strousse de viceministro de Justicia, segundo a bordo del archisamperista ministro Alfonso Gómez Méndez. Miguel viene de la dirección de Justicia Transicional del Ministerio del Interior. Su papá el expresidente dice que no influyó para nada en su nombramiento. ¡Sería esta la causa de la pataleta del expresidente Pastrana? ¡Hummm..!

De cal y de arena

La semana que termina, la Superintendencia de Industria y Comercio le clavó a Claro una multa por la friolera de $87 mil 750 millones. La cuenta de la multinacional de Carlos Slim asciende ya a $392.950 millones de pesos, que sin embargo, su presidente Juan Carlos Archila rebatió desglosando una por una las sanciones, que representan el 5% de sus ingresos anuales.

Pero a pesar de esos tropiezos, el mayor operador de telefonía celular del país patrocinará por quinto año consecutivo el Clásico RCN, con una significativa inversión. La tradicional competencia de ciclismo local se desarrollará del 27 de septiembre al 6 de octubre y tendrá un inusual punto de largada y una más extraña meta. Saldrá de Florencia, Caquetá, y terminará en una etapa contra reloj individual en el bello puerto de mar mi Buenaventura.

El paquete es completo. Claro transmitirá por su canal las etapas de la carrera, tarea que compartirá con Win Sport. Los colombianos podrán ver a través de sus emisiones la lucha de los pedales, y seguir a través de RCN radio un evento paralelo denominado el Clásico RCN Compromiso Social, que nació en 2007. Le corresponde desarrollarlo esta vez al Ministerio de Transporte y a la Agencia Nacional de Infraestructura - ANI, que bastantes cosas tienen para contar sobre esta piedra angular del Gobierno, de la competitividad y de la economía nacionales.

Otras secuelas 

Son muchos y de muy diversas maneras los afectados por las semanas de paro. Fue necesario aplazar muchas actividades económicas y eventos que ya tenían una logística y una planeación establecidas. Uno de los perjudicados fue el asombroso restaurante La Casa del Río, que debía inaugurarse hace algunas semanas en la denominada mansión de las mellizas Gómez de Cali.

Pero no se pudo. Porque uno de sus atractivos es el conjunto de ascensores para el novedoso parqueadero que se quedó estancado en Buenaventura, adonde había llegado en largo viaje desde el Oriente. Pero de allá salió y ya está instalado en la fastuosa casa. Así que esta semana, el miércoles 11 y el jueves 12, es la inauguración de La Casa del Río. Las características del evento son la comidilla de la sociedad caleña, que no halla la hora de conocer el llamado a ser uno de los más importantes restaurantes del país, ve.

Dura realidad

La firma colombiana Kpmg, afiliada a la Kpmg de Suiza, red internacional de firmas miembro que brindan servicios de Auditoría, Impuestos y Asesoría, de manera estrecha con clientes para ayudarles a mitigar los riesgos y aprovechar las oportunidades, presentó esta semana en Medellín los resultados de la Encuesta de Fraude en Colombia, realizada en los tres primeros meses de éste año con el fin de analizar el impacto de los delitos económicos en las empresas que operan en  Colombia, 35 % pertenecientes al sector público y 65 % a la empresa privada.

197 fueron las empresas encuestadas. Los cuatro tipos de delitos económicos que más afectan a las compañías en Colombia son: Malversación de activos -robo- fraude financiero- maquillaje de balances- corrupción- pagar por... o cobrar por... - y el cibercrímen- El costo estimado en 2013 por crímenes económicos es de US$3.600 millones. El 5% de las empresas que operan en Colombia ha padecido al menos un delito económico en el último año y esos ilícitos equivalen al 1% del PIB

La malversación de activos - robo - es el delito económico más común con el 46%. Y el principal ilícito lo representa el fraude financiero - maquillaje de balances- con 51 %, daño equivalente a US$1.800 millones americanos. La corrupción - pagar por... o cobrar por... - ha implicado un daño económico cercano a los US$800 millones americanos. El 70% de los delitos económicos ha sido realizado por empleados de la propia empresa. ¡Click! 

LA BARCA DE CALDERON

William Calderón

Los siete nuevos “fusibles”

Esta es la última cochada ministerial del presidente Santos para los once meses que restan de su mandato constitucional:

En el Ministerio de Justicia estará Alfonso Gómez Méndez.

Irá al  Ministerio de Ambiente Luz Elena Sarmiento.

Despachará en el Ministerio del Interior Aurelio Iragorri Valencia.

Atenderá en el Ministerio de Agricultura Rubén Darío Lizarralde.

Ingresará al Ministerio de Minas y Energía Amylkar Acosta Medina.

Asumirá en Planeación Nacional Tatiana Orozco.

En la Secretaría general de la Presidencia se desempeñará María Lorena Gutiérrez.

La cartera de Gómez.

Después de haberse preparado toda la vida para ser algún día Ministro de Justicia llega por fin al alto cargo el jurista tolimense Alfonso Gómez Méndez, quien lamenta para sus adentros  que solo sea por unos once meses.  La verdad monda y lironda es que no tendrá tiempo ni para una reforma judicial grande, mediana ni pequeña. En su Chaparral natal -donde lo apodaron “El mosco” desde los bancos escolares- deben estar de fiesta con su ministerio. Por lo pronto, le toca poner su pluma en remojo como columnista de El Tiempo.

 

Pacho, el breve.

Francisco Estupiñán se convirtió desde la noche del jueves en el más breve de todos los ministros de Agricultura que ha tenido Colombia. Salió de la apetecida cartera tres meses después de haberla asumido. Pagó un precio muy alto por el largo paro agrario. Nunca debió aceptar el tránsito de la presidencia del Banco Agrario al Ministerio en el que estuvo hasta cuando quiso el versátil Juan Camilo Restrepo. Al doctor Pacho lo remplaza Rubén Darío Lizarralde. ¿Será posible que lo devuelvan al Banco, donde lo venía haciendo muy bien?

El heredero.

Prosigue en veloz carrera, en las grandes ligas de la burocracia santista, el joven Aurelio Iragorri Valencia. El representante de los heliotropos caucanos comenzó como viceministro del Interior. Pasó después a la Secretaría General de la Casa de Nariño y acaba de ser nombrado Ministro del Interior, en sustitución de Fernando Carrillo, quien venía siendo su jefe. En la Secretaría General de la Presidencia lo remplaza María Lorena Gutiérrez

 

Un tirapiedra al gabinete.

Llega sorpresivamente al Ministerio de Minas y Energía el abogado liberal guajiro Amylkar Acosta Medina. Es recordado en la ciudad de Medellín de sus briosos tiempos estudiantiles como tirador certero de guijarros, en las pedreas frecuentes en los alrededores de la Universidad de Antioquia.   Acosta desbanca del gabinete santista (¿quién lo creyera?) al vallecaucano Federico Renjifo, un mimado del régimen, que alista maletas para irse a Francia como embajador. 

Nos devuelven a Juan Gabriel.

Después de haber realizado una magnífica gestión al frente del Ministerio de Ambiente, el alto gobierno nos devuelve a nuestro director Juan Gabriel Uribe. Lo sucederá Luz Elena Sarmiento. Bienvenido a su casa de EL NUEVO SIGLO, doctor Uribe. 

 

Los inamovibles.

Se confirmó que es inamovible la tripleta ministerial integrada por Juan Carlos Pinzón, en Defensa; Mauricio Cárdenas, en Hacienda, y María Ángela Holguín, en Relaciones.

EL CAMPANARIO

Tomás Nieto

Llegó la hora del salvavidas del sector agropecuario

Dice la Agencia Virtual de Prensa que así como el gobierno de Andrés Pastrana socializó con todos los colombianos la crisis financiera de finales de los años 90, creando el impuesto del 2 x 1.000 para que sirviera de salvamento al sector bancario colombiano, el actual gobierno de Juan Manuel Santos debe destinar siquiera un punto del 4 x 1.000 (cifra en que se convirtió el 2 x 1.000 inicial, originalmente presentado como medida transitoria) como salvavidas del sector agrícola.

“Éste es el espíritu del Proyecto de Ley que acaban de presentar la Comisión de Presupuesto de la Cámara y las comisiones Económicas de Senado y Cámara”, según el representante del Partido de la U, Juan Felipe Lemos Uribe.

El Representante antioqueño, miembro de la Comisión Cuarta o de Presupuesto de la Cámara, asegura que de ser aprobado este Proyecto de Ley, se le garantizarán al sector agropecuario colombiano cerca de 1.5 billones de pesos para 2014 e igual cifra para 2015. No más allá, porque en 2016 el Gravamen a los Movimientos Financieros o impuesto del 4 x 1.000 será desmontado, según la reciente Reforma Tributaria.

Los argumentos para defender este plan 

El señor Lemos sostiene que esta ayuda es necesaria debido a que el sector será duramente golpeado en el presupuesto nacional para 2014, el cual será aforado en 1.7 billones de pesos, 868 mil millones de pesos menos respecto de lo aprobado para la vigencia 2013.

“Con el dinero del 1 x 1.000 se creará el Fondo Nacional Agropecuario, que permitirá enfrentar estructuralmente la compleja situación del sector”, plantea Lemos Uribe, quien recuerda que los índices de pobreza de la población rural vienen en aumento: en 2012 era de 46.1 %, en 2013 ascendió a 46.8 %; la pobreza extrema era en 2012 del 22.1 %, y este año se incrementó a 22.8 %.

El representante Lemos dice que llegó la hora de que se tomen decisiones de coyuntura, como estos nuevos recursos del 1 x 1.000 que deben sumarse a los previstos en el Presupuesto General de la Nación, además de medidas estructurales como mayores y mejores incentivos a la producción, disminución de los costos de los insumos y subsidios a los mismos, ataque frontal  a la revaluación por parte del Banco de la República, control decidido al contrabando y, entre otras, limitación a la intermediación.

La socialización de las pérdidas

¡Cómo es posible que la carga de papa se la paguen al productor por 20 mil pesos, y el intermediario la venda por 60 mil! ¡Es inaudito que al productor le cueste su carga de café 650 mil pesos y la venda por 390 mil! Llegó la hora de soluciones serias y responsables”, afirma el Representante a la Cámara del Partido de la U.

Según la AVP, Lemos está convencido de que los colombianos verán bien la socialización de la crisis agropecuaria con el salvavidas del 1 x 1.000 y hasta del 2 x 1.000, que apruebe el Congreso. Explica que si el Gobierno Pastrana logró con su Decreto 2330 del 16 de noviembre de 1998 obligar a los colombianos a ceder parte de sus recursos para salvar de la “tragedia” a los bancos, el Congreso será bien visto salvando a los pobres de su tragedia de verdad, ya que los campesinos llevan aguantando 22 años de desconsideraciones.

¿De qué tamaño serán las medidas?

Una afirmación del presidente Santos al anunciar la recomposición de su gabinete ministerial, pasó inadvertida para la mayoría, no obstante la trascendencia que encierra.

Dirigiéndose al nuevo ministro de Agricultura, Rubén Darío Lizarralde, el Jefe del Estado le dijo: “Le corresponderá igualmente poner en marcha las reformas que ya hemos acordado en La Habana en materia de desarrollo rural ”.

Muchos se preguntan cuáles son esas reformas “que ya hemos acordado en La Habana”, porque hasta el momento no ha trascendido absolutamente nada al respecto.

Y agregó el Presidente: ”En los próximos diez años tenemos que sacar adelante lo que no hicimos en los últimos ochenta años, en una verdadera revolución agraria”.

Será que se le informará al país, con pelos y señales, y sobre todo con veracidad y oportunidad, cuáles son “las reformas que ya hemos acordado en La Habana ?”. Tiene la palabra, Señor  Presidente.

La justicia patas arriba

Por hurto agravado y calificado, el robo de un bolso a una dama, dos hombres de 18 y 20 años de edad fueron condenados a cuatro años de prisión por el  juzgado segundo de conocimiento de Bogotá.

Los culpables, dijo el juez, “aprovecharon la soledad y la oscuridad del sector y la despojaron de sus pertenencias, con el agravante de que ejercieron violencia sobre ella y su acompañante”.

Contrasta esta ejemplar condena con lo que sucede alrededor de los caballeros de industria y delincuentes de cuello blanco, quienes después de apoderarse de miles de millones de pesos, también aprovechando la falta de normas severas y de claridad en el sector financiero y en el oficial, siguen campantes y en pleno disfrute de lo mal habido.

Otros esquivan con miles de esguinces el peso de la justicia (¿) y esperan sin inmutarse las preclusiones, los vencimientos de términos, el  habeas corpus y otras triquiñuelas, ante el estupor de las gentes de bien.

Tolon Tilin

Estamos de acuerdo con Juan Guerra:

Resulta muy divertida la promoción que difunde el Canal Caracol para su nueva temporada del Festival internacional del humor:

Le pregunta Tola a su inseparable compañera de paraguas:

0iste, Maruja, a vos te gustaría que Pachito Santos fuera el nuevo presidente de Colombia?

La respuesta: “Sí, Tola, pero siempre y cuando esté acompañado por un adulto responsable”… 

OPINION

LA MEJOR COLUMNA

SEMANA

MAL GOBIERNO

Antonio Caballero

El resultado de estos tres años de incumplimientos le está cayendo ahora encima a Santos de un solo golpe.

Juan Manuel Santos empezó su gobierno lanzando audaces iniciativas, contradictorias con lo que de él esperaba, o se temía. Cada vez que se asomaba al balcón de la televisión para anunciar alguna la calificaba de “histórica”, de “trascendental” y de “sin precedentes”. 

Y eran por lo menos, como digo, sorprendentes. Para decepción de los uribistas, que lo 

habían creído tan uribista como su jefe: reconocimiento de la existencia del conflicto armado interno y búsqueda negociada de la paz; normalización de las relaciones con los países vecinos; reconciliación del gobierno con las altas cortes. 

Y para asombro de sus críticos, que siempre lo habíamos visto como de la pura almendra neoliberal en lo económico y del tuétano represivo en lo político: devolución de tierras; reparación de víctimas; incluso legalización de las drogas en contra de la doctrina prohibicionista de los Estados Unidos. ¿Eso era de repente Santos? Nadie lo podía creer. Cambiante sí, desde luego: siempre con el viento en popa. Pero, ya desde el poder propio ¿antisantista?

Costaba creerlo. Yo acababa de escribir, durante la campaña electoral, una columna titulada ‘Es peor Santos’: peor incluso que un irresponsable megalómano como el candidato del pantano verde, Antanas Mockus. Venía de ser nada menos que ministro de Defensa de Uribe, y en su zigzagueante carrera había sido ministro de Comercio Exterior de Gaviria y ministro de Hacienda de Pastrana. Pero ahora anunciaba que sería “un traidor de clase”, que haría “llorar a los ricos”, que devolvería a los campesinos las tierras del despojo y repararía a las víctimas, que buscaría la paz dialogada con la guerrilla. 

Después se fue arrepintiendo de sus ruidosos anuncios, que en la práctica resultaron ser como el famoso parto de los montes de los fabulistas. De devolución de tierras hubo poco: apenas algo de titulación de baldíos –y después se supo que eso era para grandes empresarios. La trompeteada reforma de la Justicia se diluyó en componendas sórdidas con magistrados y parlamentarios. La protección del medioambiente se estrelló contra la atribución de 15 millones de hectáreas a la exploración minera. El llanto de los ricos se convirtió en una caricia: una reforma tributaria que los eximió de pagar impuestos por las herencias y por los dividendos. La protección al agro consistió en reducirle su cuota de presupuesto.

El resultado de esos tres años de incumplimientos le está cayendo ahora encima a Santos de un solo golpe. Lo castigan las encuestas de opinión: nadie, desde que existen, las había tenido tan malas. Lo castiga la realidad del descontento, manifestada en paros y protestas: no se había visto unanimidad semejante desde el paro del 14 de septiembre de 1977 contra López Michelsen. 

Lo castiga la voluble clase política de la Unidad Nacional, hasta ayer ebria de mermelada como una mosca de miel: casi no consigue encontrar ministros para remendar su gabinete llegado su último año. Que puede ser de verdad el último, pues aunque no se ve todavía ningún rival de peso ni a su derecha ni a su izquierda, hasta la reelección deseada por su corazón se le complica. 

Juan Manuel Santos, que se preparó toda la vida para gobernar a Colombia y hace veinte años montó con ese propósito una fundación llamada ‘Buen Gobierno’, que se consideró a sí mismo un estadista de dimensiones históricas, comparable a los más grandes que ha dado América (pues la modestia no es su fuerte), ha decepcionado a todo el mundo. Se presentaba como la reencarnación del López Pumarejo de la Revolución en Marcha. Y ha resultado una copia del López Michelsen del Mandato Claro. Si de este se dijo que había sido en realidad un Mandato Oscuro, del Buen Gobierno de Santos puede decirse que ha sido un Pésimo Gobierno.

Él mismo, hace unos días, en la celebración del centenario del nacimiento de López Michelsen, se dejó ir en un revelador lapsus freudiano: “También recordamos –dijo– a López el gobernante: el que se propuso avanzar en ‘cerrar la brecha’ de desigualdad, algo que hoy seguimos haciendo con absoluta convicción”. Han pasado cuarenta años, y con la misma convicción de entonces la brecha se sigue ensanchando y ahondando.

SANTOS

EL ESPECTADOR

EL REMIENDO AL GABINETE

Ramiro Bejarano Guzmán

Rehacer un gabinete ministerial siempre deja caras alegres y largas, más cuando quien tiene esa responsabilidad es un presidente que apenas registra el 21% de apoyo en las encuestas.

Sin duda Santos parece haber oído las voces críticas que en todos los tonos le pedían que desbogotanizara el gabinete, pues aunque no los desechó del todo, algunos de los nombres nuevos sugieren que por fin ahora el Gobierno quiere hacerse sentir en las regiones. Por eso no pasó desapercibido que la presentación de cada nuevo ministro estuviera precedida de la indicación de su lugar de origen, y ello hizo visible al tolimense Gómez Méndez, al caucano Iragorri, al guajiro Acosta, al valluno Lizarralde, etc.

No se fueron todos los que se tenían que ir, porque se quedaron atornillados varios goditos, pero eso es comprensible. Nada más difícil que quitarle a un conservador un puesto, por eso quedaron intactos en el Gobierno. Mauricio Cárdenas, para mi gusto, debió haberse ido, sobre todo porque su reforma tributaria ha sido un desastre. Pero hay quienes aseguran que la suerte de este ministro es tal, que no le incomoda la cábala de que a lo mejor lo cambian por Angelino en la próxima fórmula vicepresidencial. Santos sería capaz y Cárdenas se dejaría. También se quedó mi paisana María Fernanda Campo, a quien algunos aseguran no le ha ido muy bien en el complejo tema de la educación, pero quien cuenta con el incondicional aprecio personal de la primera dama, respaldo suficiente para una costosa inversión política. El que a buen árbol se arrima.

La llegada del chaparraluno Alfonso Gómez Méndez al Ministerio de Justicia es un acierto. Primero, porque se trata de un jurista y un humanista de grandes quilates, además de un liberal de convicciones profundas que no ha deambulado por todos los partidos políticos en busca de canonjías, y, segundo, porque se va Ruth Correa, una pésima funcionaria que deshonró el empleo. Estamos hablando del único colombiano que detenta el inmenso honor de haber sido procurador y fiscal, y de haber ejercido ambas responsabilidades con carácter y logros significativos. Gómez Méndez está llamado a convertirse en el ministro estrella, porque tiene con qué, y porque le prestará al presidente el inmenso favor de saber discrepar en vez de aplaudir ciegamente los errores.

Amylkar Acosta es un guerrero, conocedor como pocos del tema minero, que le aportará al Gobierno su olfato y larga experiencia política. Si los costeños estaban quejosos de que no tenían un auténtico representante en el poder, ahora ya la cosa es distinta.

Aurelio Iragorri es un político desde la cuna, que obviamente se mueve bien en las entretelas del poder. Qué paradoja, se hace ministro por la misma razón por la que se tuvo que ir su antecesor: al que llega le fue bien en el “tal paro inexistente” y muy mal al que se va.

Rubén Darío Lizarralde es persona conocedora del tema agrario. Con su nombramiento el presidente busca calmar al “momiato” valluno y al empresariado que se ve amenazado con la posibilidad de que no puedan obtener una legislación que les solucione el enredo de la acumulación ilegal de baldíos. Ese será un duro hueso de roer. Seguramente el hecho de que sea exesposo de la ministra de Educación, si bien conmoverá las secciones de farándula, también desnuda la falta de imaginación de un gobierno acusado de elitista, que para renovar el gabinete nombra ministros a quienes fueron marido y mujer. Ese no será un consejo de ministros, sino marital.

Ya veremos si el presidente logra repuntar en las encuestas y sintonizarse con las regiones. Difícil pero no imposible, pues en la campaña pasada arrancó con un exiguo 2% y se hizo presidente. Por lo pronto, aun cuando no se sacudió de muchos de los que siguen estorbando, Santos parece haber aprendido a un altísimo costo la lección de que gobernar sólo con los amigos siempre termina mal.

Adenda. ¿Por qué la contratadora Sandra Morelli no le cuenta al país cuánto le costó al erario la versallesca efemérides de los 90 años de la Contraloría, que incluyó rumba en Andrés Carnes de Res y viajes a Ciudad Perdida?

ASIMILANDO EL GOLPE

Lorenzo Madrigal

Los hombres del gobierno habrán asimilado el tremendo golpe de la última encuesta.

La que tengo a mi vista es Gallup, pues el Centro de Consultoría, cuando pudo auscultar a Santos, lo hizo con Petro, el que muy poco tuvo que ver con el paro reciente y pareció acogerse a una especie del económico laissez faire, laissez passer.

El Gobierno, herido en su orgullo (paso brusco del 42 por ciento favorable al 21), propiciará nuevos sondeos. El Centro Liberal fabricará el suyo. Su principal medio amigo zumbará con disimulos para el presidente, cuya popularidad, que venía cayendo, quedó hecha cenizas.

Los secretos auspiciadores del paro agrario con sus desafueros no sólo dañaron la imagen del mandatario y de sus ministros, sino que se hicieron el daño a sí mismos, si ven caducar, bajo otro gobierno, las esperanzas de una paz negociada. Esto, porque, a las luces de hoy, la reelección de JMS está finiquitada.

Juan Manuel Santos no ha tenido carisma. Es hombre de buena voluntad y decente, sin duda; cierta dificultad al hablar lo lleva a sintetizar frases poco afortunadas. Su hermano mayor le ha aconsejado primordialmente cuidar el lenguaje. El “nuevo mejor amigo”, “tacar burro”, “el tal paro”, etc., son locuciones de gran espontaneidad, pero que no caen bien ni son propias de quien ostenta el poder. Se parecen al pijama de tierra caliente o a los pantalones amarillos.

Esto no es un análisis ex post facto, con las ventajas de los resultados a la vista, como de analista del fútbol. Queda para gente autorizada. Sólo percibo que la cosa se fue a pique. La propia inauguración de la sede de campaña por la reelección, que debió aplazarse, fue algo bien diciente, como lastimoso resultó imaginar a un Vargas Lleras (auténtico plan V) a la espera de una mejor fecha para su candidato, en terrible descalabro preelectoral.

En las toldas del uribismo sigue no habiendo la figura estelar que a estas horas estuviera dando el salto hacia el poder. Sus hombres continúan en presuntos enredos de parapolítica, de cuando todo parecía firme y duradero, como el propio gobierno, que se prolongó en el tiempo por un histórico “desvío de poder”.

Tampoco es la hora de la izquierda, siempre ilusoria, pero alguna salida tendrá la crisis que se vive con un presidente en la más baja aceptación, pese a grandes esfuerzos de gobierno. Pienso que se incurriría en peores errores si se pretendiera imponer su reelección.

La muerte de Carlos Monroy Reyes, político del linaje del general Reyes, académico, escritor y amigo, empaña el alma y deja una huella pública enaltecida, como hombre de Estado.

DESINSTITUCIONALIZACIÓN: ¿LA CAUSA URIBE O SANTOS?

Paloma Valencia Laserna

Muchos analistas dicen que Uribe desinstitucionalizaba el país. Sostienen que su microgerencia desconfiguraba la estructura estatal; les restaba importancia a las instituciones pues desdibujaba su capacidad de gestión y daba la impresión de que todo dependía del presidente.

Mi opinión era y es exactamente la contraria. Uribe le devolvió legitimidad al Estado. Con su gobierno, los ciudadanos renovaron su confianza en las instituciones, le creyeron al Estado, mostraron simpatía por el sector público. El Estado colombiano nunca ha gozado de gran respaldo; la mayoría de los ciudadanos lo consideran una burocracia inútil, un enredo de trámites imposibles, algunos incluso se quejan al pagar impuestos, pues temen que el sector público corrupto se los apropie. El Estado colombiano se parece a la figura de la madrastra lejana, indolente, déspota. Uribe rebosante de legitimidad carismática y ejecutor incansable cumplió dos funciones: derramó esa legitimidad sobre la institucionalidad y al mismo tiempo demostró que el Estado puede ser útil y servir a la ciudadanía. Era natural el resultado de que las instituciones se fortalecieran, eso es institucionalizar.

Como contrapartida, la mala gestión de este gobierno, en mi opinión, lesionó la institucionalidad. La devolvió a los estándares de inutilidad estática. Para el caso resulta útil observar lo que ha venido pasando con la imagen de las instituciones, para lo cual tomo los resultados de la encuesta Gallup de agosto de 2013 y los datos históricos que contiene. En ellos se evidencia mi tesis: el gobierno Uribe le devolvió credibilidad al Estado, en tanto que este gobierno se la resta y lo desinstitucionaliza.

Entes con prestigio, como la Corte Constitucional, que mejoraron su imagen durante el gobierno Uribe y tenían una desfavorabilidad cercana al 20%, ahora retroceden, pierden imagen, su desfavorabilidad crece hasta el escandaloso 44%. El Congreso, con un promedio de 65% de desfavorabilidad durante Pastrana, ganó imagen durante Uribe y tuvo una imagen negativa del 45%. El esfuerzo se pierde en el gobierno Santos y el Congreso tiene un promedio de desfavorabilidad del 56%, con picos del 69%.

La Fiscalía, con una imagen negativa del 20% durante Uribe, ahora gravita en un notorio 40% de desfavorabilidad. Los partidos políticos, que tenían una mala imagen ante el 60% de los colombianos, ahora están peor y 7 de cada 10 les son adversos. La Corte Suprema tiene una imagen negativa creciente desde el inicio del gobierno Santos y hoy esa desfavorabilidad supera a quienes le son favorables. El sistema judicial pasó de 45% de imagen negativa a ubicarse por encima del 70% de desfavorabilidad. De la avalancha de pérdida de imagen no se libra nadie; están afectados el Banco de la República, la Procuraduría... Incluso los medios de comunicación, que cercanos al 75% de favorabilidad pierden más de 10 puntos durante el gobierno Santos y su imagen negativa crece hasta el terrible 37% de hoy.

Las instituciones no son edificios, no dependen de sus gerentes, ni de su autonomía. Instituciones son, no porque así las designe la ley, sino porque los ciudadanos las reconocen como tales, porque se ganan el respeto y la confianza por su capacidad de servir.

SEMANA

HISTORIA DE UNA TRAICIÓN

María Jimena Duzán

Prueba de que Santos se sintió traicionado es la forma como recompuso su gabinete: mandó al carajo a las directivas de los partidos conservador y liberal.

Quien traiciona será traicionado, dice el dicho. Y el turno para ese acto alevoso, parece haberle llegado al propio presidente Santos, experto como nadie en estos avatares. ¿Y quiénes son los que quieren traicionar al presidente Santos? Pues nada más ni nada menos que sus socios políticos, los partidos más poderosos de la Unidad Nacional que, en el momento más crítico de su gobierno, en lugar de apoyarlo, le dieron la espalda. 

Esta es la historia de esa traición: 

-La traición goda: Mientras el país se llenaba de marchas y de protestas y el descontento crecía, el Partido Conservador, miembro de la Unidad Nacional anunció que iba a presentar una moción de censura contra la canciller María Ángela Holguín. La moción sorprendió no porque no tuviera sustento sino porque provenía de un partido miembro de la coalición de gobierno. 

A la semana siguiente, Omar Yepes, el jefe del Partido Conservador salió a los medios a decir que estaban muy descontentos con Santos porque les quería reducir su porción de mermelada e insinuó que si esto sucedía su partido no le quedaba más remedio que irse a donde Uribe. Además de su falta de sintonía con el país –Yepes ni siquiera se refirió a la situación de los campesinos–, le reclamó a Santos por el bajo presupuesto del Ministerio de Agricultura. 

De refilón, dijo que ninguno de los ministros conservadores que había en el gabinete representaba al conservatismo y que estos habían sido escogidos sin el concurso de la dirección del partido. Aunque después fue recogiendo esta andanada, a medida que pasaba la semana, fue evidente que Yepes aprovechó la crisis del gobierno no para ayudar sino para extorsionar al presidente. Con estos amigos políticos, para qué enemigos.

-La traición liberal: En medio de las marchas y de las protestas, su jefe Simón Gaviria nunca se puso la camiseta para apoyar a Santos ni lo hicieron los ministros liberales. El único que lo hizo fue Aurelio Iragorri, de La U, quien se arremangó y se metió en el barro de la negociación. Mientras los conservadores pedían sus puestos públicamente, los liberales filtraban sus ambiciones a los medios y se empezó a mover la idea de que si iba a haber un cambio de ministros este tenía que favorecer al Partido Liberal, porque era el que lo iba a llevar a la reelección. 

Sin embargo, la estocada final vino con la entrevista en Caracol radio del expresidente César Gaviria en plena crisis del gobierno Santos. Se esperaba que él, que era considerado el socio político de más influencia en Palacio, saliera en defensa de Santos, como de hecho lo hizo Germán Vargas Lleras, tal vez el único de los potenciales traidores que salió a apoyarlo. Pero no solo no lo apoyó sino que lo fustigó. 

Cuestionó su lejanía con el poder, cosa innegable, y remató diciendo que la razón por la cual Santos tenía problemas era porque “hacía muy poca política”. Solo le faltó decir que la mejor forma de subsanar esa falta de política era dándole más ministerios al Partido Liberal para impulsar esa gesta heroica que está haciendo su hijo Simón Gaviria del renacer liberal. 

De esta forma la saga de la traición tuvo un nuevo corolario: Santos traicionó a Uribe, los socios políticos traicionaron a Santos y a estos los traicionó la codicia. 

Prueba de que Santos se siente traicionado es la forma como recompuso su gabinete: mandó al carajo a las directivas de los partidos Conservador y Liberal. Sacó dos de los tres ministros conservadores y castigó la gula del liberalismo al conminarlo a un solo ministerio, desde donde le tocará a Simón Gaviria seguir impulsando el renacer liberal sin la mermelada que esperaban. 

Y al nombrar a Alfonso Gómez Méndez en la cartera de Justicia, un importante liberal que Gaviria había condenado al ostracismo, Santos castigó la deslealtad del expresidente César Gaviria. Vamos a ver cuánto dura este gabinete antes de se produzca una nueva traición. 

EL COLOMBIANO

NO SON LOS MÚSICOS SINO EL DIRECTOR

Rafael Nieto Loaiza

No había que ser mago para imaginarse el derrumbe en las encuestas ni el cambio de gabinete. En tres carteras llegará el cuarto ministro. Es la fragilidad de un gobierno que sufre de inestabilidad no sólo en sus nombres sino en sus políticas. Tendremos un gabinete aun más samperista y con un godito menos. Intuyo que ni la caída estrepitosa en la popularidad de Santos ni el maltrato burocrático, serán suficientes para que la bancada conservadora rompa con la "unidad nacional". El Gobierno podrá estar haciendo agua, sus políticas lejísimos de lo que deberían ser las conservadoras y los parlamentarios bravos con el golpazo, pero en período electoral la mermelada es suficiente para amarrar a los godos al buque gubernamental que naufraga.

En cualquier caso, el remezón ministerial son puros juegos artificiales. Detrás no hay nada. Ni podría haberlo, me temo. El problema no es de comunicación, como insiste inútilmente el Presidente. Si lo fuera, los miles de millones en publicidad oficial deberían haber servido para arreglar la malísima percepción ciudadana. Ahí están los medios maquillando y maquillando, silenciando a los críticos y dándole la manito al Presidente y nada, Santos va de mal en peor. No es tampoco, aunque así lo crea el Jefe de Estado, cuestión de un juicio ciudadano injusto sobre su gestión.

La caída estrepitosa en popularidad es justa como pocas. Y lo es porque en realidad el problema es el mismo Santos por, al menos, dos razones. La primera, de credibilidad. No había acabado el Presidente de posesionarse y ya estaba en la tarea de traicionar el mandato de sus electores.

A Santos lo elegimos para continuar con las políticas del uribismo. Santos no es Uribe, todos esperábamos que tuviera su propio estilo y nadie pretendía que fuera una marioneta. Pero las relaciones con el socialismo del siglo XXI y la manera de enfrentar a la guerrilla son asuntos sustantivos en las expectativas ciudadanas y en ambos temas el Presidente ha hecho lo contrario a lo que movió a los electores a votarlo. Y después no ha sido mejor. Santos dice y se desdice con la misma facilidad con la que cambia de traje. En esas condiciones, no hay quien le crea.

La segunda es de liderazgo. Más tiempo se mantiene un mono quieto que Santos en una decisión que toma. Y aun admitiendo que lo hace con la mejor intención de acertar, se demora una eternidad en decidir. Ahí está, por ejemplo, Nicaragua. La sentencia se produjo hace más de nueve meses, los expertos colombianos presentaron su informe en abril y los ingleses en mayo y vamos en septiembre y la Canciller se limita a decir que no hay prisa y se dedica mientras tanto, mire lo brillante, a decir que el proceso de paz es "inédito". En fin, el Presidente es débil y voluble y recula que es un gusto. Y como le midieron el aceite, ahí viene un paro detrás del otro.

Como sea, el problema no son los violines ni la viola sino el director de orquesta. Por eso aunque ha cambiado mil veces de ministros, en realidad nada cambia. Ni se toman decisiones ni se ejecuta.

Seguramente el Presidente repuntará algo en la próxima encuesta. No es previsible que se mantenga en semejante hoyo. Pero la reelección la tiene, hoy por hoy, embolatada. Si le sale gallo fino, lo derrotan. Vargas Lleras debe estar oliendo sangre. Si se atreve, Santos está liquidado. Si no, depende del proceso de paz. Pero ese también está enredado. Si se cumple lo que dijo la Constitucional, los máximos responsables de crímenes de guerra y de lesa humanidad, los miembros del secretariado y los del estado mayor de las Farc, no podrían acceder al beneficio de no ser perseguidos penalmente ni sus penas pueden ser totalmente suspendidas. Es decir, deben pagar cárcel. La tendrán muy cuesta arriba en La Habana tratando de convencer a los bandidos de que firmen en esas condiciones.

La Corte corrigió el marco jurídico de impunidad. Por eso Santos, que no quiere reconocerlo, está pidiendo aire. La relacionista de Exteriores lo convenció de que en la ONU le darán una mano. Está perdido.

COLOMBIA EN EL TOBOGÁN

Ana Mercedes Gómez Martínez

Imposible ignorar y no hacer comparaciones y mirar tendencias, basada en la encuesta bimestral de percepción ciudadana que en los últimos días del respectivo bimestre y los primeros del que se inicia, hace Gallup Colombia. Y no es un trabajo nuevo. La reciente, es la encuesta 96.

El resultado muestra que hay pesimismo generalizado, a pesar de la mermelada repartida a muchos programas, regiones, instituciones y aun a medios de comunicación. Es que tal mermelada no puede contrarrestar a las redes sociales, aunque noto, cada vez con más claridad, que muchas de ellas apoyan incondicionalmente al actual presidente y tratan de contrarrestar el descontento y la desesperanza populares. ¿Será una estrategia montada desde la Casa de Nariño?

Habrá quienes digan que la imagen desfavorable del Presidente se dio porque la encuesta 96 coincidió con el paro agrario. En algo influyó, pero no tanto como para que hubiera habido esa descolgada vertical, como el más inclinado de los toboganes de los parques de diversiones. Lo preocupante es que no estamos en ningún parque de diversiones sino en un país que soñamos mejor para las generaciones futuras.

Comparo el mayor grado de desfavorabilidad frente a Santos con el mayor grado de desfavorabilidad que tuvo Andrés Pastrana durante su cuatrienio. Ambos puntajes coinciden con negociaciones con las Farc. El 74% desfavorable de Pastrana se da cuando entró en crisis definitiva el diálogo del Caguán. La imagen desfavorable del 72% de Santos se da en medio de los diálogos en Cuba y el paro agrario que, en principio él quiso ignorar, pensando, tal vez, que así se disolvería solito, por arte de magia.

Lo curioso es que estos dos presidentes nacieron en Bogotá. Y hay que advertir que de 1200 encuestas en las cinco ciudades capitales más importantes de Colombia, Bogotá tuvo 400. Las otras: Medellín, Cali, Barranquilla y Bucaramanga, tuvieron de a 200 encuestas cada una. Es decir, en Bogotá hubo el doble de encuestas que en cada una de las otras ciudades escogidas. Y así tenía que ser por el número de habitantes del Distrito Capital.

Y en Bogotá están el Gobierno central, el palacio presidencial, los ministerios, los departamentos administrativos. Allá hay más posibilidad de ver a los funcionarios del Ejecutivo, empezando por el Presidente.

Con razón, en la reestructuración del gabinete, Santos enfatizó en que lo iba a desbogotanizar y que sería un gabinete para la paz y las regiones. Que la mayoría de los primíparos vivan en la capital colombiana es otro tema.

Todo esto contrasta con las cifras con respecto a Álvaro Uribe, un doblemente provinciano porque no nació en Medellín sino en el Suroeste antioqueño. Sin embargo la cifra de desfavorabilidad más baja en sus ocho años de gobierno, 29%, se dio en febrero de 2010, cuando la Corte Constitucional hundió la segunda reelección.

Llama la atención la respuesta frente a los diálogos de La Habana. El apoyo a estos diálogos bajó en dos meses del 70% al 62%. No es mucho. Pero si observamos la opinión ciudadana frente a las Farc, la respuesta es dramática: 95% de opinión desfavorable, frente a 2% de opinión favorable.

Las Fuerzas Militares, con 75%, tienen la mejor calificación, aunque bajan 2 puntos comparadas con junio. Hay que anotar que todas las instituciones bajaron, con excepción de la Iglesia que se mantuvo en el 66%. Los Medios de Comunicación, 61%, (cayeron 9 puntos). La Policía, 59%, (cayó 7 puntos). La Contraloría, 58%, (cayó 4 puntos). La Procuraduría, 57%, (cayó 4 puntos). La clase empresarial colombiana, 56%, (cayó 6 puntos). Los sindicatos 52%, (no encontré el dato de junio). La Fiscalía, 51%, (cayó 7 puntos).

En desfavorabilidad, después de las Farc, están los Partidos Políticos y el Sistema Judicial colombiano, con 74%.

En cuanto a los ministros, me llama la atención que la mejor librada sea la de Relaciones Exteriores, a pesar del Fallo de La Haya sobre el cual ni la ministra Holguín ni el Presidente se han pronunciado oficialmente. Y a pesar de la situación con Venezuela y Ecuador. Curiosamente, la imagen de Maduro es la más desfavorable de todas: 82%. ¿Quiénes calificaron bien a la Canciller? ¿Acaso los grandes empresarios que buscan vender más a Venezuela, siempre y cuanto ésta les pague? Pero hay que resaltar que el manejo de las relaciones internacionales bajó 23 puntos.

El tema institucional ha ido cayendo desde 2010, según Jorge Londoño de la Cuesta, Gerente de Gallup Colombia. Esto es grave. ¿Qué estrategia tendrá el presidente Santos para firmar un acuerdo con las Farc y puede que con el Eln? Y ¿qué hará desde el poder para lograr ser reelegido, en medio de un ambiente de desesperanza? Repito, como Hamlet, ser o no ser, esta es la cuestión.

UNA ENCUESTA CASTIGADORA

Rudolf Hommes

El presidente Santos tiene razón en haberse quejado de que la encuesta Gallup que se conoció la semana pasada es injusta con él. No solamente muestra que ha perdido popularidad y que ha caído significativamente el apoyo popular que tenía sino que la gente parece querer que el gobierno se comporte de otra manera, y por eso los encuestados le están cobrando aún las cosas en las que su gobierno ha mostrado evidentes logros.

Por ejemplo, el 81 por ciento de los encuestados dice que el costo de vida ha empeorado, lo cual no es cierto. El 68 por ciento opina que el desempleo ha aumentado, cuando se han registrado tasas de desempleo menores que en el pasado. La economía se ha desacelerado pero no está tan mal como refleja la encuesta. Hasta con políticas evidentemente populares de esta administración, como la de vivienda popular, se registra un aumento de los que dicen que la situación ha empeorado. Esto lo que refleja es un alto nivel de impaciencia y de insatisfacción con todo, que induce a calificar mal al gobierno y al Presidente, aún en lo que ha mostrado buenos resultados. Es una señal de que debe cambiar y el descenso de su popularidad le da una enorme libertad para hacerlo.

Álvaro Uribe, que ha sido monedita de oro durante años, ha perdido 17 puntos de favorabilidad y ganado 18 puntos de opinión desfavorable desde septiembre de 2012. Los candidatos de su movimiento no se perfilan como presidenciales viables, incluido Pacho Santos que tiene el porcentaje de favorabilidad más alto entre ellos, pero una opinión desfavorable aún más alta. Al único precandidato que le va bien en esta encuesta es a Navarro Wolf. Sus gestiones para crear un movimiento de oposición uniendo a los partidos pequeños le han ganado adeptos, precisamente cuando le está poniendo distancia a esa posibilidad.

El alcalde de Cali y el gobernador Fajardo salieron muy bien librados. Petro sigue con una aprobación de 30 por ciento y 60 por ciento que desaprueban. El 52 por ciento de los encuestados está dispuesto a votar en la revocatoria y casi el 80 por ciento lo haría a favor de destituirlo. Si Petro abusa de su autoridad y continúa tomando medidas desafiantes, cada vez es más probable que se sume el 2 o 3 por ciento adicional que se necesita para la revocatoria.

La encuesta revela aspectos muy interesantes de la opinión pública frente a la paz: El 57 por ciento de los encuestados está de acuerdo con pagar impuestos para darles ese dinero a las víctimas de la violencia. El 69 por ciento cree que el Ejército sería capaz de derrotar a la guerrilla. A pesar de ello, el 62 por ciento está de acuerdo con el proceso de paz y 57 por ciento en que se debe insistir en los diálogos hasta alcanzar la paz. Esto podría interpretarse como un espaldarazo al proceso de La Habana, aunque la opinión en contra de las Farc es muy negativa y el 60 por ciento no cree (y solamente el 36 por ciento cree) que se llegará a un acuerdo en La Habana que le ponga fin al conflicto armado con las Farc.

PROTESTAS

EL ESPECTADOR

¿CÓMO SERÁ LO QUE SIGUE?

William Ospina

Colombia se ha vuelto imprevisible. Ahora todos vivimos el asombro de lo que ocurre y la incertidumbre de lo que viene.

La dirigencia colombiana, que creía conocer el país y tener la fórmula para seguirlo dominando, parece desconcertada, da palos de ciego en sus respuestas y en sus decisiones.

El más desconcertado parece ser el presidente. Pero es que para él es más difícil que para los demás: no porque le estén estallando en las manos todos los problemas, sino porque él tiene un libreto que debe obedecer, y Colombia parece cada vez más insatisfecha con ese libreto.

Se diría que es injusto que un gobierno padezca la herencia de todas las crisis acumuladas. Pero este presidente ha sido parte de todos los gobiernos anteriores: ¿cómo no va a ser justo que le toquen las consecuencias?

El libreto es la política neoliberal. Un modelo diseñado por los grandes poderes mundiales para serle recetado al planeta entero. Y es de una simpleza que causaría risa si no fuera la causa del sufrimiento y la desgracia de millones de personas.

Consiste en que en este mundo sólo tienen derecho a existir un modelo de economía y un modelo de orden social, el que han alcanzado las naciones de gran poderío industrial, militar y tecnológico. Todos los países deben ingresar en ese esquema al que hace tiempo ya se llama el desarrollo, el progreso, la sociedad de consumo.

Abarca todo: la gastronomía, la salud, el entretenimiento, la cultura. Y está diseñado sólo para el auge del capital financiero y la satisfacción  de unas élites mundiales. Estos países periféricos sólo pueden ser consumidores de la  industria multinacional, productores de materias primas para su poderío comercial y tecnológico.

Y así se abren camino esos contratos leoninos que se llaman tratados de libre comercio, mediante los cuales pequeñas economías mal planificadas, sistemáticamente debilitadas por gobiernos venales o faltos de carácter, tienen que abandonar toda agricultura, toda industria local, todo rasgo cultural y toda relación original con sus territorios. Entrar en el carnaval del consumo de remanentes del gran sistema mundial, y sólo producir lo que ese sistema necesita, lo que esos mercados estén dispuestos a comprarles.

La publicidad y la manipulación mediática descalifican las tradiciones locales, y pregonan la moda, los hábitos, las adicciones y los espectáculos del poder planetario. Una red tentacular de juguetes fascinantes, de espectáculos deslumbrantes, de entusiasmos evanescentes reemplaza en todo el mundo valores y costumbres. La modernidad consiste ya en una avalancha de sutiles órdenes de la publicidad y del comercio. Todos los países deben ser tributarios de unas sociedades centrales; dóciles imitadores de sus modelos.

Colombia ha vivido el progresivo desmonte de su agricultura y de su industria. Los tratados no toleran siquiera pequeñas salvedades culturales: el todopoderoso socio dice al final: “Lo toma o lo deja”, y los vendidos gobiernos deben firmar los tratados que redactó el más fuerte.

Allí se decide si los campesinos pueden o no utilizar las semillas que nos legó una tradición milenaria; si tenemos derecho a producir nuestros alimentos o si tenemos que resignarnos a un menú diseñado por las tiranías de la geopolítica. No importa si estamos acostumbrados a producir arroz o flores, cumbias o mitologías: el mercado mundial decidirá qué vive y qué muere en las sociedades.

La economía se limita a los precios, no a los equilibrios sociales, no a la satisfacción de las comunidades, al trabajo, al conocimiento, o a los valores sagrados de la memoria y del territorio. Todo lo que no sea ciego lucro será llamado atraso y superstición.

Y no importa que ese modelo sea precisamente el que está destruyendo al planeta. Arrasa los bosques, degrada los ríos, envenena los mares. Argumenta que viene a salvar a la humanidad del atraso, la pobreza y la desdicha. Pero produce hastío para sus propios ciudadanos, violencia e infelicidad para los ajenos, degradación del mundo, y basura, mucha basura.

Antes nos preguntábamos si un modelo era viable para la humanidad; ahora nos preguntamos si la humanidad es viable para el modelo. Y parece que no, que no es viable. Aquí, por ejemplo, los campesinos no caben en la economía.

Colombia despierta presa de un extraño malestar. La sospecha de un orden en el que todos terminemos siendo indeseables. Si protestamos, seremos declarados rebeldes; si nos irritamos, nos llamarán enseguida el cartel de los vándalos. Si queremos tener un país, seremos la encarnación del atraso y de lo premoderno. Si queremos una cultura propia, seremos declarados extraterrestres.

Como antes Gaviria y Pastrana y Uribe, Santos es el encargado de velar por que la orden se cumpla. Y está desencajado porque el país le está diciendo que no. Al comienzo eran los campesinos de una región: los declaró infiltrados. Después los de varias regiones: los declaró inexistentes. Bloquearon las vías: los declaró rebeldes y envió la represión. Entonces la ciudad se solidarizó con el campo: monumentales manifestaciones de estudiantes y ciudadanos sorprendieron a Colombia.

El país no obedece al libreto: opina, reacciona, los jóvenes reclaman la memoria que les han negado, la gente comprende que los gobiernos están desmantelando el país que tuvimos y no han sido capaces de construir algo a cambio.

La realidad se ha vuelto enigmática: no puede ser leída, tiene que ser descifrada. Y no sabemos si el Gobierno está descifrando lo que pasa. Y no sabemos cómo será lo que sigue.

PUBLICIDAD VANDÁLICA

Lisandro Duque Naranjo

El comandante de la policía, general Palomino, exhibió el pasado fin de semana un afiche con 48 fotos, de menores de edad en su gran mayoría, supuestamente miembros de un tal “cartel de los vándalos” que “causó los destrozos durante el paro agrario”.

Primero la Policía había dicho que quienes armaron  tropel  estaban  encapuchados,  pero según ese afiche los muchachos tenían sus rostros   descubiertos. Y además no se los veía “en acción” propiamente, sino por  calles y carreteras, indignados al igual que miles de ciudadanos que durante esas fechas comenzaron a anticipar una primavera  en este país que parecía condenado a un verano político extenuante.

 Todavía recuerdo el debate nacional que  hace como tres años  motivó  la iniciativa de la senadora Gilma Jiménez Niño,  de publicar en grandes vallas los rostros de los exconvictos  que    habían cometido violencia sexual contra menores.   Ese proyecto, con razón,  fue rechazado por los ciudadanos, pues   incitaba al linchamiento, esa manera salvaje de convertir a la multitud en asesina.

 Es de esperar entonces que,  sobre la vandálica publicidad de hace ocho días contra jóvenes  –que se acompañó con  ofertas de recompensas a quienes delataran a los fotografiados–,  emitan sentencia  los jueces. Porque no solo se violó  el código del menor, en lo que al uso de imágenes se refiere, sino que,  así se hubiera tratado de gente mayor,  la ausencia de pruebas, o el tamaño de la presunta infracción, no permitía ese despliegue digno de grandes criminales.

  De ese mosaico fotográfico, sin embargo, fueron excluidos   ciertos tipos grandecitos ya que, protegidos por agentes del “orden”,  fueron grabados in fraganti, por celulares,  en el momento de quebrar a  caucherazos ventanas de residencias particulares. En Boyacá, una campesina grabó a ninjas del Esmad que apedrearon su casa. Y les decía: “!Véanse esta noche en youtube!”. Cómo son  de agradecidos los boyacenses para los juegos de palabras: se pusieron de ruana al país, le sacaron la leche al Gobierno, son muy buenas papas. Ví este grafiti  en una pared bogotana: “Mi abuela me enseñó a luchar por la papa”.

 Parece rota ya, ojalá para siempre, la hegemonía  “noticiosa”  de las grandes cadenas. Se las ve íngrimas en  la mentira.  Las cámaras sueltas por ahí  son las que denuncian los abusos de la autoridad.

 Ese relevo en la reportería, producto de una cultura digital masiva, parece estar siendo entendido ya por quienes gobiernan. Aquí y en Cafarnaún.  De momento, el único procedimiento que se les ocurre para repelerlo es tirarles gases y chorros de agua a quienes esgrimen celulares. Pero es que son tántos, mejor dicho es todo el mundo. ¿Qué irán a hacer? Que viva la tecnología.

 Los jóvenes se despabilaron, se han politizado. Y está equivocado el general Luis Eduardo Martínez,  comandante de la policía de Bogotá,  cuando dice que los malcriados son apenas los de “universidades públicas y  colegios de bachillerato”, lugares que recomienda intervenir “para restituir el civismo, la urbanidad, los valores”, y demás boberías.

 En cuanto a los campesinos,  dejaron de ser esas figuras costumbristas que agachaban la cabeza para mirar su sombrero entre las manos. Ya no posan como para el “Angelus” de Millet, todos melancólicos. Ahora tienen una piedra del carajo. Y por supuesto no iban a hacer una huelga  para exhibir sus cebollas, sus quesos, su café, en los bordes de las grandes vías, como si ofrecieran agricultura típica. Muy turística la cosa, según lo querían los de las emisoras.  No, qué cuento.

EL TIEMPO

OPORTUNISTAS

Ricardo Silva Romero

No es nada fácil protestar en Colombia, pero, no obstante los ladridos y las palmadas en la espalda, aquí está de pie esta oportuna multitud de ciudadanos.

Vale una columna la forma amañada como ha sido contado este paro. Porque una columna aparece –el mundo no es más este lugar ambiguo en el que contradecirse es lo normal– cuando se hace evidente que ha estado sucediendo una insensatez, un abuso de poder, una trampa: por ejemplo, es insensato bombardear a Siria, aun cuando el ataque se lleve a cabo para castigar crueldades de Antiguo Testamento, pues una vez más se puede reducir al Oriente Próximo a un encadenamiento de tragedias; es abusivo suspender la licencia de funcionamiento de la Fundación Los Pisingos, poniendo en juego la vida de 84 niños huérfanos, para castigar una serie de “problemas administrativos” que fueron reparados hace meses; y es tramposo decretar de golpe cómo se irá ordenando la Bogotá de todos, como si lo ideológico estuviera por encima de lo técnico, sobre la base de que era imposible conseguir un consenso.

Vale una columna lo que se ha dicho de este paro, digo, pues desde el viejo país, amurallado y vano como la antigua Cartagena, se ha estado haciendo hasta lo imposible para encontrarle “peros” a una protesta que en verdad es un grito de auxilio: “pero hubo zánganos”, “pero hubo enemigos políticos”, “pero hubo vándalos”.

Dice la Biblia: “Por cómo enlacen las oraciones los conoceréis”. Y la verdad es que Colombia ha estado habitada estas semanas –de 1819 para acá– por comentaristas impunes que han preferido decir que “la protesta era justa pero se desató la barbarie” a declarar que “se desató la barbarie pero la protesta era justa”.

Para bien y para mal, para adorar esta vida o para prevenirla, cada quien se engaña a su manera. Y en esta Colombia que va del narcisismo al derrotismo sin escalas, al mismo tiempo tentados por la violencia, por las jerarquías “que hay hasta en el cielo” y por la ilusión de una democracia que sólo se ha dado en nuestra esquina del mundo, llevamos dos siglos diciendo que “lo más importante es preservar las instituciones” como si alguna vez hubieran sido preservadas. Y sí, las quejas de los campesinos son fundamentales y las protestas de los indígenas son válidas y los estudiantes tienen derecho a reclamar un país educado en el que en verdad se pueda competir, pero “por qué no marchan por las aceras”, “por qué no protestan solos en sus fincas”, “por qué los encapuchados terminan siendo siempre la noticia: por qué no sabemos protestar”.

Se da en Colombia: el derechista que se ve liberal en el espejo, el oportunista que siempre encuentra cómo probar su coherencia. “Estoy más cerca de Uribe que de Santos”, dice el expresidente Pastrana, tan bueno para ver las inconsistencias de los otros, en un arrebato de protagonismo digno de un personaje secundario, porque ha aprendido a probar que no está siendo un farsante. “Uribistas son los que creen en las ideas de Álvaro Uribe y antiuribistas los que las entienden”, bromea el exministro Silva, pendiente de lo malo de ese gobierno pasado al que tanto sirvió, porque siempre podrá decir que lo suyo no ha sido plegarse a un líder sino trabajar por su patria: por la suya. Es desde allá, en fin, desde el club privado del poder, desde donde pueden afirmarse una cosa y la contraria con la misma vehemencia. Es con las gafas condescendientes del poder con las que puede verse que las protestas campesinas son justas pero que lamentablemente fueron invadidas por los enemigos del gobierno.

El mundo es tan absurdo que sólo queda la ficción. Pero hay una columna, también, cuando se da un gesto digno de ser celebrado: y hay que seguir diciendo que no es nada fácil protestar en Colombia por lo mínimo, pero que, no obstante los ladridos y las palmadas en la espalda, aquí está de pie esta oportuna multitud de ciudadanos.

DINERO

LA PRIMAVERA COLOMBIANA

Fanny Kertzman

Muchos nos preguntamos por qué el reciente paro agrario no evolucionó hacia una “primavera colombiana”. La respuesta es que esta primavera ya se dio en 2008, cuando los colombianos en todo el mundo marchamos contra las Farc.

El paro no afectó a las ciudades como sucedió en Brasil, porque en Colombia la población urbana se siente bien. Mientras que en 2002 solo 16% de la población se clasificaba como clase media, hoy la proporción llega a 30%. Cinco millones de personas han subido de estrato. Estos hogares ganan entre $2 millones y $8 millones mensuales.

No es casualidad que precisamente desde 2008 Colombia se clasifica entre los países de ingreso medio-alto según el Banco Mundial, con un ingreso per cápita que fluctúa entre US$4.000 y US$12.600 anuales. La inversión extranjera, el desarrollo del sector minero-energético y la expansión de la agroindustria son los factores fundamentales en este cambio, y este se ha dado gracias a la neutralización de la guerrilla.

La frontera económica se ha expandido. Bucaramanga, por ejemplo, es la ciudad donde más ha crecido la clase media. La UIS pasó de ser un foco guerrillero a la primera entidad formadora de ingenieros de petróleos. El nivel de vida del estrato 6 en Manizales equivale al estrato 2 o 3 en Yopal.

La expansión de la clase media ha contribuido a la modernización del país. Avianca, por ejemplo, cuenta con 5.000 frecuencias semanales y movilizó 23 millones de pasajeros en 2012. La ruta más demandada es Bogotá-Medellín. Hace 15 años había vuelos cada hora. Hoy hay vuelos cada 15 minutos. Para ciertos destinos volar tiene el mismo precio que viajar por tierra.

El desarrollo significa también formalización. En 2000, los electrónicos y electrodomésticos se vendían en Sanandresito. Hoy se venden en K-tronix. El Exito, por su parte, ha desarrollado las tiendas Surtimax, alianzas con los tenderos de barrio, que han llevado a que estos se formalicen, paguen impuestos y cumplan con la seguridad social. Gracias al concepto del empaque pequeño, los clientes de Surtimax pueden hacer el mercado para una semana con $15.000. Ya no hay que comprar el aceite por cucharadas o el jabón por cuartos.

Pero a pesar de que se ha avanzado tanto en áreas urbanas, el sector rural sigue por debajo de la línea de pobreza y no tiene quién abogue por él. Mientras la clase media urbana se manifiesta a través de las redes sociales y es capaz de tumbar la Reforma a la Justicia, los campesinos no tienen quién los represente. ¿Dónde estaba Fedepapa en las protestas? ¿Y Analac? La Federación de Cafeteros con su pesada carga burocrática no representa a nadie.

Y ni qué decir de los congresistas. Compran el voto de los campesinos y se roban la plata de las obras públicas y las regalías. No es casualidad que el Congreso sea la segunda institución más despreciada por los colombianos, después de las Farc.

Lástima que esto no lo entienda nuestro Presidente. No solo se inmoló con la frase de “el tal paro agrario no existe”, sino que ahora su gran aliado para la reelección es la vieja clase política, encarnada en Ernesto Samper. Basta decir, como lo denunció la periodista Claudia Morales en Twitter, que el 29 de agosto estaban en petit comité en un restaurante del norte de Bogotá, Ernesto Samper, su escudero Juan Fernando Cristo, su jefe de prensa, Darío Arizmendi, su exsecretario Juan Mesa –hoy miembro emérito de la Fundación Buen Gobierno– y Luis Carlos Sarmiento, decidiendo si sacaban o no al Ministro de Agricultura. Santos le insufló respiración boca a boca a Samper desde que lo nombró su representante en el Catatumbo.

Last, but not least, y volviendo a la primavera colombiana, Santos cree que el conversatorio de La Habana le garantizará la reelección. No hay tal. El paro le demuestra al Presidente que la política agraria se decide en Boyacá y Nariño y no en La Habana. Lo que se está discutiendo en Cuba es inane. Las Farc no representan a nadie, y menos a los campesinos a los que han azotado y empobrecido en esta larga guerra. La Fuerza Pública ha demostrado con creces que puede ganar la guerra. “Si nos dejan”, nuestro valiente ministro de defensa Juan Carlos Pinzón, el de mostrar en este gobierno, los puede “neutralizar”. No más “quizás, quizás, quizás”.

ECONOMIA

EL ESPECTADOR

COLOMBIA: ANTE LA CUARTA OLEADA

Miguel Ángel Bastenier

Hace apenas unos meses Colombia parecía instalada, cuando menos a los distantes ojos europeos, en el mejor de los mundos.

Las conversaciones de paz con las Farc marchaban a buen ritmo y el tema de la tierra parecía en vías de solución; el TLC aún no había empezado a surtir efectos, con lo que todavía era posible verlo como una pieza esencial en la modernización del país; se estaba discutiendo el espinoso problema de la participación política de los insurrectos, pero el presidente Santos se atrevía a hablar de una “refundación de Colombia”. La economía es cierto que mostraba incipientes signos de flaqueza y el mandatario, respetado pero nunca ídolo de masas, resistía razonablemente las andanadas —trinos y relámpagos— de su antecesor el expresidente Uribe, que no podía por mandato constitucional disputarle la reelección ni tenía candidatos-suplentes capaces de enamorar a la parroquia.

Y como quien dice, de súbito, los europeos leemos en Le Monde que “se desplegarán 50.000 soldados para garantizar la movilidad y el abastecimiento de alimentos que comienzan a escasear, debido a los bloqueos de campesinos”; y en El País que el presidente “anuncia la militarización de Bogotá tras graves disturbios” en los que ha habido varios muertos. Y uno se pregunta, ¿qué ha ocurrido? Colombia, la impertérrita, la que lo asimila todo, se ha desarticulado aparentemente por su eslabón más débil, el campo, provocando una agitación como no se conocía en décadas. El senador Jorge Robledo, líder de la izquierda canónica, el Polo Democrático Alternativo, asegura que él ya lo había advertido. El TLC, Tratado de Libre Comercio firmado con EE.UU., aunque es posible que abarate algunos productos de primera necesidad que se producen fuera de Colombia a menos costo o están subsidiados, es la ruina para muchos productores colombianos. Una desavenencia grave, pero no irresoluble con los campesinos del Catatumbo, se había convertido en un extendido paro agrario, bloqueo de carreteras, manifestaciones de protesta en todo el país, en las que comandos vandálicos aprovechaban para entregarse al saqueo y a la violencia ante lo que el presidente parecía haber perdido toda capacidad de reacción. Se veía a Juan Manuel Santos desamparado de sí mismo, herido por la crítica de Uribe, a la que no había hecho gran caso durante bastante tiempo, pero a quien últimamente replicaba con tanta frecuencia como probable nerviosismo. El presidente, además de negar contra toda evidencia que hubiera paro agrario, hacía responsables a las Farc de los desmanes en campo y ciudad, lo que no tenía por qué ser falso, puesto que cada uno juega la partida con las cartas que tiene en la mano y la guerrilla dizque marxista, trataba de debilitar la posición negociadora del Gobierno. Pero estaba claro que nadie obligaba a marchar a los que marchaban, ni protestar a los que protestaban.

¿Es este el fin del llamado ‘milagro colombiano’? ¿Había sido todo un tinglado de relaciones públicas? Entre primavera democrática e indignación ciudadana, la violenta exasperación de parte de la sociedad colombiana, una idea general podría abrirse paso: este es un momento crucial de la historia del país porque vive o está a las puertas de una cuarta reapropiación del territorio. La primera fue la conquista y colonización española en los siglos XVI y XVII; la segunda llegó con la Independencia que, básicamente, consistió en un cambio de manos del poder dentro de una misma clase de españoles, peninsulares o americanos; la tercera se produjo durante las décadas de la violencia, el narcotráfico y la propiedad mal habida de buena parte de la tierra, de los años 50 en adelante; ¿y la cuarta? Colombia, con más de 1’100.000 kilómetros cuadrados, dos veces y pico la extensión de España, y una población similar de unos 45 millones de habitantes, está todavía en buena medida por explotarse a sí misma. Y hay quien sostiene que a eso es a lo que juega el TLC, a explotar de mano extranjera una economía reprimarizada, sea hoy Estados Unidos, mañana Europa o pasado China la que saque partido de ello.

Colombia es un gran país en urgente necesidad de modernización y Juan Manuel Santos parecía tan sólo hace unos meses el mejor guía de esa caravana hacia el futuro. Pero es la sociedad colombiana, tanto o más que su gobierno, que cualquier gobierno del signo que sea, el que debe acometer esa tarea y dejar de utilizar el indudable flagelo de las Farc para justificar que apenas haya dado comienzo la tarea.

MAL DE MUCHOS

Armando Montenegro

Las proyecciones macroeconómicas poco a poco han evolucionado para aceptar la realidad. Al final del año pasado se proclamaron pronósticos del orden del 5% anual para el crecimiento del PIB de 2013.

Después de que se reconoció que sectores completos estaban en serios problemas, comenzó la corrección. Del 5% se pasó al 4,8%, luego al 4,4% y ahora al 4%. Por momentos se dice que en los trimestres siguientes mejorarán las cosas, pero las correcciones son inevitables. El Banco de la República ya habla de que el crecimiento será “cercano al 4%”, y pronto los pronósticos oficiales, como los de ANIF y Fedesarrollo, mostrarán cifras que empiezan por tres.

Lo que pasa en Colombia, en mayor o en menor grado, es lo mismo que ocurre en otras economías emergentes. Después de grandes anuncios para el año 2013, con el paso de los meses los pronósticos han ido aterrizando a números cada vez más pequeños. El crecimiento de México y Brasil apenas si superará el 2%; el de Chile, si acaso llegará al 4%, y el de Perú, siempre el mejor de la región, será superior al 5%.

Este comportamiento se debe a dos fenómenos complementarios: (1) con la caída de los precios de numerosos commodities, a causa de la desaceleración de China, los recursos de inversión abandonan las economías emergentes y, de paso, impulsan la devaluación de sus monedas y frenan su crecimiento; (2) la recuperación de Estados Unidos está atrayendo los mismos capitales que salieron hacia los países periféricos en los años de recesión. Con la previsible alza de la tasa de interés en ese país, se profundizarán la devaluación y la salida de los recursos que hasta hace poco inundaban nuestras economías.

Durante los años de auge, Colombia y América Latina no lograron el despegue definitivo hacia el desarrollo, sino, simplemente, gozaron de una bonanza transitoria, como tantas del pasado. Y como otras veces, analistas y gobiernos pensaron erróneamente que las vacas gordas habían llegado para quedarse, que éramos ricos y que podíamos tirar la casa por la ventana. Poco o nada se ahorró.

De todas formas, la situación de Colombia es relativamente buena. Un crecimiento del PIB del orden del 3,5% en 2013 sería aceptable. Hay que contar, eso sí, con que las tasas de los TES y otros papeles continuarán su camino alcista y que el precio del dólar se acercará e incluso superará la barrera de los $2.000 en los próximos meses (este fenómeno se atizará por la incertidumbre política, la reelección o la sucesión de Santos y los interrogantes sobre los impactos del proceso de paz).

Ante este nuevo panorama, de regreso de las fantasías minero-energéticas, Colombia debe aceptar que la bonanza produjo una aguda enfermedad holandesa que postró la industria y la agricultura y debe repensar el futuro de su aparato productivo, lejos de las modas frívolas de las locomotoras. El crecimiento no vendrá, fácil y gratis, de la magia de los altos precios internacionales, sino de nuestros esfuerzos para transformar la economía. Es hora de volver a pensar en serio en asuntos como la ciencia y la tecnología, una verdadera revolución en la educación pública y apoyar masivamente lo que, por fin, se está comenzando a hacer en materia de construcción de infraestructura de transporte. Sin éstas y otras iniciativas semejantes, difícilmente el crecimiento del PIB superará el 4% en los mejores años.

CAMBIO DE LAS CONDICIONES MUNDIALES

Eduardo Sarmiento

Las condiciones mundiales adquieren una forma compleja para América Latina que sólo ha sido asimilada por Argentina y Brasil. En un principio la crisis recayó en Estados Unidos, luego se trasladó a la zona euro y ahora amenaza a los países de mediano desarrollo.

En el último libro mostré que las condiciones que siguieron a la globalización dieron lugar a un contexto externo en el que no hay lugar para todos los países. El mundo está expuesto a una guerra para conformar superávits comerciales, aumentar las exportaciones y ampliar la producción industrial, en la cual todos no pueden tener éxito. Así, la crisis de Estados Unidos en 2008 obedeció al monumental déficit comercial con China y, la de Europa, a los cuantiosos déficits en cuenta corriente de las economías periféricas.

En ambos casos la solución se ha logrado a cambio de trasladar los desbalances al resto del mundo. Así, la política de Estados Unidos de tasa de interés cero y compra de títulos con recursos de emisión propició revaluaciones en los países emergentes y redujo a la mínima expresión los enormes superávits de China y Japón. Por su parte, los desajustes cambiarios de los países periféricos de Europa se han morigerado con políticas contractivas que han deprimido los salarios y elevado la competitividad.

América Latina nunca entendió en qué juego se encontraba y se sintió gratificada por haber sido la región que salió mejor librada de la crisis. Le apostó a la revaluación y los déficits en cuenta corriente. El tipo de cambio fijo, los TLC y la rienda suelta a la inversión extranjera le ofrecían un medio fácil para estimular el crecimiento económico. Las economías experimentaron grandes reducciones en los precios de las importaciones que en algunos países, como Colombia, significaron crecimientos del producto nacional de más del 1% por año, a cambio de propinarles serios golpes a la industria y la agricultura. El corto plazo se antepuso al largo plazo.

Es precisamente lo que se está viendo en la actualidad. La mejoría de las condiciones de Estados Unidos llevará a la reducción del programa de compra de títulos del Tesoro con recursos de emisión, que ya ha generado alzas en las tasas de interés de largo plazo y devaluaciones en los países emergentes que revertirán la ganancia en los términos de intercambio. En efecto, México, Brasil, Chile y Colombia registran fuertes caídas en la actividad productiva.

La lección es clara. La entrega de las balanzas de pagos de los países emergentes al mercado los ha dejado desprotegidos y expuestos a déficit en cuenta corriente y retroceso industrial. De nuevo se muestra que las relaciones comerciales van en favor de los países que tienen mayor productividad, y más cuando los tipos de cambio se dejan a la discreción de la Reserva Federal y se renuncia a las políticas industriales y agrícolas.

Las aperturas comerciales, el tipo de cambio y los TLC fueron concebidos a la luz del principio de ventaja comparativa, el cual establece que los diversos países están en las mismas condiciones de competir en los mercados. Todos pueden aumentar la producción de bienes transables y equilibrar las cuentas externas. El resultado ha sido controvertido por los hechos que muestran que las actividades de ventaja comparativa son limitadas por las demandas. Los países en desarrollo tienen que producir otros bienes de mayor complejidad para impulsar el crecimiento y el empleo, y sólo lo pueden hacer, sin grandes sacrificios de salarios, dentro del marco de tipo de cambio fijo ajustable, aranceles, controles de capitales y políticas industriales y agrícolas.

¿POR QUÉ?

Mauricio Botero Caicedo

¿Por qué, como pregunta UN reciente editorial del diario La República (agosto 28/13), una cooperativa emblemática como Colanta pide que se acabe el Fondo Nacional del Ganado para que Fedegán no use los parafiscales para los sueños políticos de sus directivos?

¿Por qué algunos voceros de la izquierda, montados en un pedestal moral, declaman a los cuatro vientos que las tierras con vocación agrícola deben ser dedicadas exclusivamente a producir comida y no biocombustibles, pero mantienen un silencio sepulcral respecto a productos como el café y el tabaco, que de comida no tienen nada?

¿Por qué el país no analiza con rigor y honestidad la disyuntiva del sector agropecuario, como lo plantea Mauricio Vargas en su columna en El Tiempo (julio 1/13), que radica en escoger si “al entregarles parcelas a los campesinos sin mayor previsión no serviría más que para repartir miseria y condenar a los supuestos beneficiarios a sucumbir ante la imposibilidad de explotar estos predios” o, como hizo Lula en el Brasil, “ampliar de modo descomunal la frontera agrícola de su país a regiones semiáridas que estaban perdidas para la producción... y generar cientos de miles de empleos que dispararon las exportaciones: en mayo Brasil vendió a otros países casi 8 millones de toneladas de soya y obtuvo por ellas más de 4 mil millones de dólares —¡en un solo mes!—, en desarrollo de una revolución económica sin precedentes con un beneficio social que ha permitido sacar a decenas de miles de familias de la miseria”?

¿Por qué los medios, parte de la clase política, buena parte de los funcionarios y cerca de la totalidad de los columnistas, en pleno conocimiento de que el 75% del empleo en el campo es informal, que el 68% de los campesinos es pobre, y que un 33% está en la indigencia, siguen estigmatizando en los medios, en el Congreso y parte del Gobierno a la mediana y gran empresa agroindustrial, que es precisamente la que crea empleos formales?

¿Por qué el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural no suspende de inmediato a una alta funcionaria del Incoder que, según reciente artículo de la redacción judicial del diario El Tiempo (agosto 30/13), “la Procuraduría llamó a audiencia para que responda por dos presuntas graves faltas: ‘Suministrar datos inexactos o que no correspondían a la realidad’ para ocupar el cargo y posesionarse sin cumplir con los requisitos, como la experiencia mínima”? La Procuraduría dice que las fechas de la declaración no concuerdan con archivos de la Judicatura y de la Universidad Nacional que supuestamente la emplearon entre diciembre de 2005 y enero de 2006. ¿Por qué no se investiga al padrino de la señora Mujica, la relación que tiene con ella y las razones que lo llevaron a mantenerla en el cargo a pesar de las graves irregularidades?

¿Por qué, como afirmó con inmensa sensatez uno de los líderes agrícolas, no se entiende que resolver el paro “es cuestión de mejores políticas y no más subsidios”? ¿Por qué se le sigue echando la culpa a los TLC o a una “apertura” de hace 22 años, que poco a nada tienen que ver?

Finalmente, ¿por qué son los senadores, los representantes, los gobernadores, los alcaldes, los asambleístas, los concejales de los Llanos, de la Altillanura, de la Amazonia, de la Orinoquia quienes solicitan al unísono que haya gran inversión, mientras que una minoría de extrema izquierda urbana, acompañada de unos fanáticos despistados de la ecología fundamentalista, son los que pretenden que sólo sean los campesinos los que hagan inversiones en las unidades agrícolas familiares (UAF)?

EL TIEMPO

EL TLC, UNA TRAGEDIA ANUNCIADA

Daniel Samper Pizano

Hace años se advirtió que los tratados de libre comercio perjudicarían al campo. ¿Pasará igual con las abejas y los plaguicidas? Los nuevos ministros invitan al pesimismo.

En las últimas semanas ocurrieron dos hallazgos históricos: el país descubrió que tenía campesinos, y los campesinos descubrieron que tenían poder. Fue un sacudón. Un sacudón que ofreció a los ojos de los colombianos la presencia constante y a veces traumática del sector rural y la incapacidad del Gobierno para manejar la situación.

Como los conflictos suelen parir soluciones, ya surgen frutos del paro rural. Uno es la congelación de la norma ICA 970 del 2010, que castigaba a los campesinos por sembrar semillas de su propia cosecha. El éxito de la revisión corresponde sobre todo a la periodista Victoria Solano, cuyo documental 9.70 encendió de indignación a las redes sociales. (Ver )

El ICA acusó al documental de mentir. Bueno, no mentiría tanto toda vez que el Gobierno paralizó la abusiva medida. También dijo que la norma nada tenía que ver con el TLC, cuando la verdad es que a ambos los inspira el mismo espíritu neoliberal que desde 1991 puso en venta el patrimonio público, arrinconó al Estado para que no estorbara a las “fuerzas el mercado” (que no son ciclones naturales, sino capitalistas despiadados) y abrió las compuertas aduaneras sin reparar en futuras víctimas. El TLC enfrentó a unos productores nacionales sin vías, crédito ni apoyo a una catarata de excedentes agropecuarios subsidiados. Ganó la catarata.

Que nadie diga que era imprevisible. No pocos analistas económicos (Sarmiento, Kalmanovitz, Robledo, Cabrera, Suárez…) lo anunciaron. Les respondieron que tenían la mente caduca y que, tras leves desajustes iniciales, el campo se reorganizaría para competir. Sí: ya se vislumbra esa segunda etapa, protagonizada por conglomerados a los que servirán los campesinos como jornaleros. El nombramiento de un empresario palmero en Minagricultura confirma la nefasta tendencia.

Pánico en los panales

La desaparición masiva de abejas en muchos lugares del mundo –Colombia entre ellos– se detectó en el 2006. Como las abejas son indispensables para la reproducción de numerosos cultivos, pronto se reportaron grandes pérdidas agrícolas en Estados Unidos, Europa y Asia. Los científicos sabían que una suma de trastornos ambientales conspira contra las abejas, y tardaron poco en identificar al principal asesino: los plaguicidas neonicotinoides, que las desorientan, y diezman las colmenas.

Ante la evidencia, una decena de países desterró estos químicos. Resistiendo presiones de los poderosos fabricantes, hace cinco meses la Unión Europea prohibió –por lo pronto durante dos años– tres de los más peligrosos nicoplaguicidas: imidacloprid, clotianidina y tiametoxam. Colombia había expedido hasta junio 59 registros comerciales a productos elaborados con las peligrosas sustancias. Hace una semana pregunté al Ministerio de Ambiente cómo se protegerá a la menguante población de abejas colombianas. El ya exministro Juan G. Uribe me contestó que la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) y el ICA vigilan que se cumplan las normas de precaución en el uso de los plaguicidas cuestionados. Un producto –Endosulfán– fue prohibido y “se consideran las acciones que ha tomado la Comisión Europea (…) sobre la evaluación del riesgo para las abejas”.

Albert Einstein señaló que “si las abejas desaparecieran del globo, al hombre solo le quedarían cuatro años de vida”. Puesto que el Gobierno sabe los graves riesgos de los abejicidas, ¿por qué no los conjura cancelando sus licencias? Cuando surgieron inquietudes, la Unión Europea escogió proteger el medio ambiente. Colombia, en cambio, concede el beneficio de la duda a los laboratorios. El veto a los nicoplaguicidas debería ser parte del mea culpa con que el país oficial busca reparar su maltrato al mundo campesino. Pero la nueva Ministra de Ambiente fue quien aprobó los venenos en la Anla, de modo que hoy reina el pánico en los panales.

PAZ

EL ESPECTADOR

REFRENDACIÓN: EL EJEMPLO SUDAFRICANO

Rodrigo Uprimny

¿Será posible superar la polarización que existe sobre la refrendación de un eventual acuerdo de paz? Las Farc insisten en la asamblea constituyente, mientras que el Gobierno se opone radicalmente a esa opción.

La experiencia sudafricana podría inspirarnos una salida de este impasse, sin que debamos copiar mecánicamente ningún mecanismo, pues los contextos y los actores son muy distintos. Ni las Farc son el Congreso Nacional Africano (CNA) de Mandela ni en Colombia hay Apartheid.

A principio de los noventa el gobierno blanco del Partido Nacional (PN) había aceptado que era necesario superar el Apartheid y adoptar una nueva Constitución. Había una coincidencia esencial con el CNA, pero el proceso estaba bloqueado, pues tenían visiones enfrentadas sobre cómo alcanzar ese propósito.

El PN y la comunidad blanca querían una Constitución negociada, que surgiera de un pacto de cúpula entre el PN y el CNA, pues consideraban que sólo así tendrían las garantías de que no serían avasallados en una democracia en donde los negros serían mayoría. Pero el CNA quería liquidar el Apartheid y fundar una nueva Sudáfrica basada en el principio de autodeterminación; para ellos la nueva Constitución tenía que ser aprobada por una asamblea constituyente electa popularmente.

El conflicto parecía irresoluble. El ingenio sudafricano consistió en diseñar un proceso constituyente en dos etapas, que acercó las dos posiciones.

La idea fue negociar una Constitución interina, que sirviera de base para un gobierno de transición y para la elección popular de una asamblea constituyente, encargada de redactar la Constitución definitiva. Esa Constitución interina contenía 36 principios constitucionales, que eran esencialmente de derechos humanos y no discriminación, y que tenían que ser respetados por la Constitución definitiva.

Las elecciones generales en 1994 ratificaron la Constitución interina y eligieron al gobierno de transición y a los integrantes de la asamblea constituyente: el triunfo de Mandela y del CNA fue abrumador. La asamblea constituyente electa redactó entonces la Constitución definitiva, pero ésta sólo pudo ser promulgada después de que el recién establecido Tribunal Constitucional certificó que el texto respetaba los principios de la Constitución interina.

 Así, la Constitución interina negociada, con sus principios constitucionales intangibles, tranquilizó a la comunidad blanca, al otorgarle garantías de que no sería discriminada en la nueva Sudáfrica, pero abrió igualmente el camino a la asamblea constituyente popular y fundacional que exigía el CNA.

En Colombia, en vez de polarizarnos sobre si la alternativa es o no una asamblea constituyente, deberíamos inspirarnos en la flexibilidad y el ingenio sudafricano. Y deberíamos buscar, por la combinación creativa de distintos tiempos y mecanismos de participación, crear un procedimiento de ratificación, que responda a las aspiraciones y preocupaciones tanto de las Farc como del Gobierno. Imposible que no lo logremos.

VOLVER A LA MACARENA

Alfredo Molano Bravo

HACE 25 AÑOS LLEGUÉ POR PRIMERA vez a La Macarena, un pueblito con pista y río. Viajé desde San José del Guaviare en una canoa con motor de 30 caballos. Un día entero navegando río arriba.

Al comienzo todo fue emoción, la selva siempre es excitante, transmite una vibración desde sus oscuros adentros. Lo más duro fue el paso del raudal, un estrecho de rocas enormes que impone al río —semejante gigante— el cauce. En su centro había una piedra llamada La Tonina que sobresalía y dividía el cauce en dos. Las canoas tenían que orillarse y hacer una cabriola para evitar un naufragio. No había salvavidas, la guerrilla no lo exigía. Pasado el raudal, se volvía a respirar y a mirar las yarumeras de las orillas. De tanto en tanto cruzaba otra canoa. Había pocos puertos: El Cafre, Nueva Colombia, La Cachivera. Desde los barrancos aparecían de trecho en trecho destacamentos guerrilleros que saludaban si el motorista era conocido; si no, obligaban a las lanchas a detenerse y a sus pasajeros a identificarse. El control era riguroso.

La Macarena tenía cinco manzanas, una droguería, tres graneros, cinco cantinas. No había Fuerza Pública. El avión —un DC-3 reluciente— de vez en cuando traía víveres, gasolina y correo. Salir a ver el aterrizaje de ese monstruo era el gran programa. Mirar quiénes llegaban y suponer a qué venían los pocos forasteros era un juego de azar. La colonización había invadido el Parque Nacional. Un millón de hectáreas de selva. Los colonos vivían del aserrío de maderas finas, del pescado y del maíz. El ritmo del pueblo lo imponían las corrientes poderosas, y en verano solemnes, del río. De vez en cuando se oía lejana una motosierra. Los domingos algunos vecinos iban a bañarse a Caño Cristales y había riña de gallos.

Hace dos semanas regresé con mi nieta Antonia. Viajamos por Satena —siempre incumplida— porque hacerlo por río es casi imposible. El paso por el raudal está prohibido, pese a que dinamitaron La Tonina. Es obligatorio el salvavidas y hoy no hay línea diaria de San José a La Macarena. Los puertos son hoy pueblos; la guerrilla no se ha ido, pero ya no está a la vista. La gente viaja en avión con maletas de cuero, sombreritos de explorador y tiquetes de regreso. El día de nuestra llegada había once avionetas y tres aviones DC-3, brillantes como peces. El pueblo tiene 25 manzanas, circulan por él camiones, volquetas, buses, carros y mil motos. Hay soldados de todos los rangos por todos lados. Miran y miran. Llegan helicópteros y aviones artillados. Dicen en la región que hay 14.000 soldados y tienden a aumentar al ritmo del turismo y de la ganadería. Cuando estuvimos, el general invierno dominaba. La paja de las sabanas estaba verde y las algas estaban en todo su esplendor. Pero había cientos de turistas vigilados discretamente por un destacamento del Ejército. Mi nieta y yo no tuvimos ningún tropiezo, pero al ritmo que van las cosas se podría llegar a imponer el modelo imperante en Machu Picchu, donde los “operadores de turismo” monopolizan el negocio, desde los vuelos hasta los hoteles, pasando por los permisos. De todas maneras, Caño Cristales y en general el Parque Nacional Natural de La Macarena son auténticas joyas. La comunidad ha impedido la entrada de cadenas hoteleras y de grandes firmas de turismo, pero el peligro ronda.

La coca está de capa caída, el pueblo vive una nueva bonanza que tiene su apogeo entre julio y noviembre. Al llegar el verano, el calor seca las algas y desaparecen los visitantes, lo que, dicho sea de paso, no disminuye la actividad militar. Los helicópteros suenan día y noche; llegan y salen aviones, se ven gringos, las descargas en el polígono hacen pensar que los combates no están muy lejos. Mi nieta, que no entendía qué pasaba ni por qué, me preguntó: “Abuelo, ¿por qué los soldados nos miran como si todos fuéramos malos?”. No pude responderle.

CORRUPCION

SEMANA

GOBERNADORES QUE NO DEBIERON SERLO

León Valencia

Ni los partidos fueron capaces de retirarles el aval, ni el gobierno nacional y la opinión pública pudieron detener su elección.

Las revelaciones de estos días sobre los gobernadores de Sucre, Julio Guerra Tulena; de Magdalena, Luis Miguel Cotes, y de Cesar, Luis Alberto Monsalvo Gnecco, me han hundido en una terrible decepción. Sobre los riesgos de corrupción o de compromiso con las mafias de estas personas había advertido en los meses previos a su elección. 

También había llamado la atención sobre Cielo González de Huila, Nelson Mariño de Casanare y Héctor Fabio Useche, gobernadores destituidos. Prendí las alarmas sobre el gobernador de La Guajira, Kiko Gómez Cerchar, e hice anotaciones preocupantes sobre los gobernadores de Santander, Richard Aguilar, y de Arauca, José Facundo Castillo. 

Las investigaciones sobre las elecciones de 2011, realizadas por un calificado grupo de profesionales encabezados por Claudia López, decían que estas personas, de ser elegidas, podrían causar un grave daño a los departamentos por sus antecedentes personales o por los grupos familiares y políticos que los rodeaban. Alertamos al gobierno, a los partidos políticos, a la opinión pública con datos y testimonios recogidos con mucho juicio y ponderación en las regiones. 

Nos sometimos a diatribas y amenazas, a demandas y duras controversias. Para nada. Ni los partidos fueron capaces de retirarles el aval, ni el gobierno nacional y la opinión pública pudieron detener su elección. He sentido el asombro de muchos periodistas ante la decisión de la Gobernación de Sucre de entregarle una vez más el negocio del chance  a una empresa de Enilse López, alias La Gata.  

También ante tan descarada asignación del contrato para construir la llamada vía de la prosperidad al Consorcio Ribera Este, proceso en el cual el gobernador Cotes desoyó todos los llamados y los cuestionamientos del gobierno nacional y de la Controlaría General de la Nación. El influyente e incisivo Julio Sánchez Cristo se la jugó toda para detener estos contratos y nada pudo. El Tiempo criticó severamente la actitud de las gobernaciones. ¿Por qué estos gobernadores se atreven a desafiar a instituciones nacionales y a poderosos medios de comunicación? 

¿Por qué las mafias del contrabando y el narcotráfico están haciendo su agosto en Cesar con la complacencia del gobernador Monsalvo Gnecco, tal como lo denuncia en un  documentado artículo de la Silla Vacía?  ¿Por qué Kiko Gómez sigue tan campante en La Guajira después de que SEMANA le dedicó una portada y un artículo con graves y sustentadas acusaciones? Nada  les importa. Están dispuestos a todo. Han descubierto que la acción política contra ellos o las decisiones de la Justicia no llegan nunca o lo hacen cuando tienen las manos llenas de dinero y han construido una aterradora trama de poder. 

Al presentar las investigaciones que advertían el riesgo de que estas personas llegaran al poder en estas regiones, decíamos que los compromisos que tenían con grupos herederos de la parapolítica y con mafias de la contratación llevarían irremediablemente a que sus mandatos estuviesen rodeados de escándalos y cuestionamientos. Ocurrió primero con los gobiernos de Valle, Huila y Casanare, ocurre ahora con los de la Costa. Todo esto se habría evitado si los partidos, los organismos electorales y el gobierno nacional hubiesen actuado a tiempo. Los costos para las instituciones son enormes. Me entristece y me decepciona esta situación. 

El caso del triángulo compuesto por La Guajira, Cesar y Magdalena es alarmante. Cada día es más un territorio de nadie. Tuvimos la ilusión de que la desmovilización de alias Jorge Cuarenta y de Hernán Giraldo, lo mismo que los juicios a un importante grupo de dirigentes políticos que se aliaron con ellos, sería el comienzo de la reinstitucionalización de la región y de la normalización de la vida democrática en estos territorios. No ha ocurrido así. Otros líderes políticos ligados a las mafias han tomado la batuta, otros clanes y grupos mafiosos están controlando el territorio traspasando la frontera y llegando hasta Maracaibo. 

De los gobernadores de Arauca y Santander no se conocen aún escándalos importantes. Ojalá no ocurran. Pero la condena a Hugo Aguilar, padre del mandatario de los santandereanos, ratifica los nexos de esta familia con el fenómeno de la parapolítica. También una significativa función de advertencia realizada por la contralora, Sandra Morelli, al gobernador de Arauca a propósito del contrato de la remodelación y readecuación del hospital San Vicente revive el temor al fantasma de la corrupción.

LA PATRIA

UN TÁBANO PARA YEPES

Orlando Cadavid Correa

Si de algo puede estar seguro Ómar Yepes Alzate es de los esporádicos aguijonazos que le seguirá propinando, mientras sea presidente del Directorio Nacional Conservador, el periodista Hernán Peláez Restrepo, el director de "La Luciérnaga", el programa radial de mayor audiencia en Colombia, convertido en su tábano a partir del momento en que el político caldense accedió al cargo en sustitución del senador costeño Efraín Cepeda Sarabia.

Los dos protagonistas de esta pequeña historia son casualmente de ancestros quindianos: Peláez, de Montenegro, y Yepes, de Génova.

El periodista comenzó a llevar por la calle de la amargura (o por carretera destapada) al jefe político desde el mismo momento en que recibió las llaves de la Casa Conservadora del Barrio La Soledad, de Bogotá, enrostrándole el urticante baldón del "Robo a Caldas" que hizo famoso, en los años 80, el entonces procurador general Carlos Jiménez Gómez.

Como Peláez se puso muy insistente, en sus emisiones de la tarde, en la recordación del viejo escándalo, fundamentado en el "Roscograma" de la Licorera caldense, denunciado por la Unidad Investigativa de El Tiempo dirigida por Daniel Samper Pizano, el ahora exsenador Yepes le dirigió una carta desestimando el episodio que, en su sentir, "no fue más que un titular de prensa de la época", con la esperanza de que rectificara.

Hernán -que sabe dónde ponen las garzas- no solo se sostuvo en lo dicho sino que reprodujo una añeja publicación de El Espectador que incluía nombres completos y montos precisos de las "mordidas" recibidas mas no desmentidas por la clase política caldense a través de la contratación de la Licorera. Y para rematar su réplica, le dijo en su acento caleño: "Mirá, vé, no te creemos, Ómar".

Durante la campaña atípica que concluyó el pasado 25 de agosto con la elección del ingeniero Julián Gutiérrez Botero como nuevo gobernador de la comarca, cuando se mencionaba, de vez en cuando, el nombre del respetado abogado y periodista Augusto León Restrepo Ramírez, el candidato de Yepes, Peláez le rayaba las espuelas al dignatario conservador con lo del sonado robo por el que finalmente nadie fue a parar a la cárcel. Sin duda, el sambenito influyó de alguna manera en el veredicto de las urnas, aunque la abstención bordeó el 70 por ciento.

El miércoles 4 de septiembre (hace cinco días) volvió a picar el tábano de "La Luciérnaga" cuando uno de los coequiperos de Peláez informó que se trabaja en Bogotá en los preparativos de un homenaje de desagravio que le va a ofrecer Yepes al expresidente Andrés Pastrana Arango, "por los patrióticos servicios prestados al país y al Conservatismo". Sin pelos en la lengua y con buena dosis de sarcasmo, el director de la franja radial puso en duda el valor que contenga un homenaje brindado por el exparlamentario en cuestión. Otra manera de expresar que no le cree, ni le simpatiza el nuevo director del Partido de Caro y Ospina que después pasó a ser el de Mariano y Laureano y en tiempos más recientes de binomios tan singulares como los que conformaron Ciro y Carlina y Yidis y Teodolindo.

La apostilla: La vía más expedita para que Ómar Yepes se quite de encima el mortificante inri del "Robo a Caldas" parece bien sencilla: que haga pública su declaración de renta y precise de dónde proviene su patrimonio que despierta tantas suspicacias entre sus propios conciudadanos.

TELEFONIA CELULAR

BRIBONES DE CUELLO BLANCO

Felipe Zuleta Lleras

Yo no sé ustedes, pero yo, que a mi edad poco pierdo la paciencia, vivo absolutamente desesperado con el servicio de los celulares, ya que se caen las llamadas, la atención al público es pésima y las tarifas son altísimas.

Esta semana, por sólo poner un ejemplo para no ponerme mamón, tuve que marcar 17 veces para hacer una llamada: 17 veces.

Y lo peor, no lo logré, tuve que meterle dinero a Skype y llamar por allí a la persona con la que necesitaba hablar. Me parece que las multas que les pongan son pocas comparadas con el deficiente servicio que nos prestan. Y más grave aún resulta que ni el Gobierno ni ninguna de las entidades del Estado han podido con esto. Esta semana la Superintendencia de Industria y Comercio le puso una multa a Claro por $87.000 mil millones, que el presidente de la empresa dudó olímpicamente. Claro no le ha pagado al Distrito otra deuda enorme y tampoco se intimida con las quejas de los usuarios, es decir, como se dice popularmente, le importa un soberano culo lo que pase. Y, por supuesto, que eso es así porque la Comisión de Regulación de Telecomunicaciones no ha sido capaz de prohibirle que siga capturando nuevas víctimas hasta que solucione los problemas pendientes. Sí, me refiero a los 33 millones de usuarios que tiene y que tenemos problemas.

 El Estado colombiano se arrodilló como un plebeyo ante la fortuna del sr. Slim. Pero, eso sí, hay de que uno deba un peso en impuestos, no pague sus multas e impuestos locales al día, porque entonces ese Estado sí es implacable con nosotros, sus víctimas. La ineficiencia y el temor del Estado ante este señor poderoso nos la cobran a los ciudadanos del común aplicando todo el rigor de las normas contra los colombianos.

Esta situación no deja de ser paradójica, injusta y arbitraria, por no decir que ilegal además. Tal vez el único funcionario capaz de aplicarle las tuercas a Claro ha sido el superintendente Pablo Felipe Robledo quien, póngale la firma, acabará lleno de investigaciones y denuncias penales porque el todopoderoso señor Slim contratará a sus perros de caza para destruirle la vida a un funcionario que sólo está haciendo una cosa: cumplir bien con la Constitución y las normas que juró cumplir.

Como colombiano siento que los operadores de celular nos están metiendo su roñosa mano en nuestros bolsillos y nos tumban minuto a minuto sin que podamos evitarlo, pues el celular se volvió una necesidad cotidiana. Nos roban, nos joden la vida, nos engañan, nos hacen toda clase de vejámenes y no podemos hacer nada, absolutamente nada.

 El Estado colombiano es un Estado cobarde, ineficiente y perezoso que se pone en muchas oportunidades al lado de los bribones de cuello blanco. Al fin y al cabo, Claro y Telefónica son extranjeros y por eso se pasan las normas por la faja. Rico así, ¿cierto?

Notícula: Esta semana Blu Radio cumplió un año. Y a los ciento de miles de oyentes que nos acompañan sólo les puedo decir con el corazón en la mano, gracias.

DEPORTES

EL ESPECTADOR

EL MENSAJE DE PÉKERMAN

Editorial

UN REMATE DE RADAMEL Falcao García de casi 30 metros puso en aprietos al portero ecuatoriano Máximo Banguera, quien dejó servida en bandeja de plata la oportunidad que el volante colombiano James Rodríguez aprovechó sin dilación: metió el gol que tiene eufórico al país. Así, sencillo, es como se juega al fútbol.

Y, terminado el partido (uno duro y sufrido, lleno de ataques de parte y parte), llegó la fiesta de celebración en el Metropolitano de Barranquilla el pasado viernes: la clasificación al Mundial de Brasil está a la vuelta de la esquina. Es entendible la alegría.

Sí, es cierto, el triunfalismo excesivo que caracteriza a esta sociedad colombiana es nocivo: porque da imágenes erradas, porque cuenta una historia que no necesariamente corresponde a la realidad. Sin embargo, celebrar esto, el hecho de que la selección nacional vuelva a un mundial después de 16 años, es algo necesario, entendible, consecuente. Es refrescante.

¿Ya está la selección adentro del mundial que se celebrará el próximo año en Brasil? Matemáticamente no y por eso mismo es que la FIFA no la etiqueta de esta forma. Pero la probabilidad de que ello no suceda es mínima: tendrían que darse una serie de resultados un tanto absurdos. Por ejemplo, que Colombia perdiera todos los partidos y sus rivales ganaran por goleada en los otros que quedan pendientes en la eliminatoria que se disputa. Colombia espera lograr el martes, frente a Uruguay, el punto con el que se pueda decir que está clasificada formalmente.

El director técnico, José Néstor Pékerman, fue alzado en hombros en el estadio de Barranquilla: no es para menos. El cambio gira en torno a él. La diferencia la hizo su presencia, su trabajo, su estilo, su acompañamiento. Pero la cosa excede el terreno futbolístico y la táctica empleada, como pudiera pensarse. Es muchísimo más que eso.

Claro que esta generación es una de jugadores excepcionales, destacados la gran mayoría de ellos en ligas internacionales, que acompañan el proceso de la selección bajo la premisa de buscar la gloria: no necesitan hacerse conocer ni ganar mucho dinero. Eso, en muchos casos, ya lo tienen asegurado. Y todo a la vez que el deporte nacional, en conjunto, empieza a obtener éxitos que antes eran impensables. Todo eso ha puesto su cuota.

En este caso, sin embargo, nos queremos referir exclusivamente a la labor del técnico extranjero, al hombre de atrás. Aunque fue rechazado al principio por parte de unos sectores que insistían (no sin cierto vicio patriotero) que aquí debería primar un técnico colombiano, o por quienes desconfiaban de su  hermetismo, Pékerman unió rápidamente al país. Todos, de repente, estaban tirando para el mismo lado: clasificar al mundial.

Siempre que un técnico colombiano asumía el rumbo de la selección (hubo ocho seguidos en tres eliminatorias), había un rechazo por parte de algún sector: la prensa, los jugadores, los dirigentes, los hinchas. Y, cómo no, esto se reflejaba en lo futbolístico, en el desgano en el campo, en la desesperanza de un país.

Pékerman era ajeno a estas realidades de acá y se comportó con sobriedad. Aparte del acompañamiento que hizo a sus jugadores, hablando con los técnicos de sus equipos, haciéndoles seguimiento constante, lo más importante fue su mensaje transversal. Ese mismo que hizo evidente en las declaraciones que dio a la prensa el viernes una vez terminó el partido: “los colombianos, trabajando juntos, pueden lograr grandes cosas”. Así, sencillo. Ese pensamiento, esa actitud frente al fútbol, es lo que nos tiene a un paso del mundial.

La selección, como buena representante de lo que es Colombia como país, estaba desunida y ya no. La enseñanza de Pékerman, mucho más allá del fútbol, es bastante grande. Ojalá la pudiéramos aprender para los muchos retos que juntos podríamos superar.

SIRIA

EL ESPECTADOR

EL NOBEL FALLIDO

María Elvira Bonilla

El comité nobel del parlamento de Noruega solicitará que se le retire a Barack Obama el Premio Nobel de la Paz otorgado prematuramente en 2009, hipnotizado por las promesas del recién elegido presidente comprometido entonces a jugársela por un nuevo paradigma político y moral para Estados Unidos y, por su influencia y poder, para el mundo.

Pero el Comité no sólo quiere castigar su intención de intervenir militarmente en Siria, sino “las políticas seguidas por el presidente Obama, tanto en lo referente a política exterior, especialmente en Oriente Medio y el norte de África, como el inaceptable recorte en libertades de los ciudadanos de su país y del resto de mundo, con la utilización de programas espía como Prism (los famosos drones), el mantenimiento de la prisión de Guatánamo, etc. hacen que considere totalmente inadecuado que ostente este galardón, por no ser merecedor del mismo”. Y tienen razón. Porque ni qué decir de su persecución a Edward Snowden por haberse atrevido a desafiar el poder y denunciar prácticas ilegales por parte del gobierno de Estados Unidos a escala mundial, y violando los derechos de millones de personas al interceptarles las comunicaciones privadas, incluida la presidenta Dilma Rousseff, que tiene al Brasil en franca indignación.

Poco a poco Barack ha ido mostrando el cobre. De una manera tan decepcionante que cada vez se confunde más con George W. Bush, a quien le ganó precisamente por oponerse a sus prácticas arbitrarias y violatorias de derechos fundamentales bajo el pretexto de enfrentar la amenaza terrorista. La gran pregunta es: o se trata fatalmente de uno más de los políticos sin convicciones, acomodaticios y oportunistas, cuyo compromiso de cambiar la guerra por la diplomacia y el respeto no fue más que un discurso elocuente, o se trata de un gobernante atrapado indefectiblemente por las estructuras de poder belicosas e imperiales del establecimiento estadounidense que finalmente cierra filas sin dejar margen de acción. Cualquiera de los dos escenarios es lamentable para un presidente en el que su país, el mundo y hasta el jurado del Premio Nobel de la Paz creyeron.

En su momento, pocos entendieron por qué le otorgaban el Premio Nobel a un hombre que apenas iniciaba un gobierno y que, si bien significaba una oportunidad de cambio, éste apenas se vislumbra a través de las palabras, elocuentes, eso sí, con las que Obama hipnotizó al mundo. Resulta increíble presenciar la manera como se esfumó esta postura y todo indica que actuará incluso en contravía de la opinión pública de su país que, a diferencia del ataque a Irak, no lo acompaña mayoritariamente, porque sabe que el argumento de las armas químicas es un simple pretexto, como ocurrió con Irak.

El Comité Noruego le puso de presente a Obama que “este premio se otorga a las personas que hayan trabajado más o mejor en favor de la fraternidad entre las naciones, la abolición o reducción de los ejércitos existentes y la celebración y promoción de procesos de paz”, tal como aparece en el testamento de Alfred Nobel. Una tarea que no es exactamente la que él está cumpliendo.

EL TIEMPO

LA GUERRA DE OBAMA

Salud Hernández-Mora

Los tribunales internacionales deberían juzgar al tejano como criminal de guerra por provocar destrucción y cientos de miles de muertes al inventar teorías conspiratorias y armas de destrucción masiva que nunca existieron.

Volverán a embarrarla, no aprenden. Y lo peor es que nos embarcan a todos en su locura. Occidente pagará la infinita soberbia de Washington, porque bombardear a Siria para castigar al dictador es una provocación inútil y peligrosa.

Ni detendrá la guerra que devasta a ese maravilloso país, ni socavará el poder del tirano. Incluso, si acabara con Asad por la fuerza, el futuro sería igual de oscuro porque los rebeldes, que son una heterodoxa amalgama de movimientos de distinto pelaje, prolongarían el caos y tampoco garantizarían una paz estable.

Que analice Obama el infierno en el que convirtieron a Irak, en contra de la opinión de miles de millones de ciudadanos de todo el mundo que tienen más sentido común que los incompetentes gobernantes que eligen. No era necesario ser un genio para saber que George Bush y sus aliados europeos cometían una atrocidad y una torpeza de consecuencias impredecibles. También entonces aseguraron que sería una operación quirúrgica de escasas semanas.

Los tribunales internacionales deberían juzgar al tejano como criminal de guerra por provocar destrucción y cientos de miles de muertes al inventar teorías conspiratorias y armas de destrucción masiva que nunca existieron.

Y ahora Obama, que recibió un inmerecido Nobel de Paz y que aún no ha cerrado Guantánamo, sigue sus pasos sin escuchar a incontables personas en toda la Tierra que advierten de los riesgos de una intervención militar gringa en un país árabe enclavado en una región muy conflictiva e inestable.

Las encuestas en el imperio muestran que más del sesenta por ciento de los estadounidenses está en contra del ataque contra Siria, pero una comisión de Relaciones Exteriores del Senado dio su visto bueno. En Gran Bretaña, el Parlamento rechazó las pretensiones bélicas del Primer Ministro conservador, mientras que el francés Hollande, del Partido Socialista, pretende lanzar a su nación, plagada de islamistas radicales, a una aventura condenada al fracaso.

Incontables expertos auguran el desastre, puesto que Washington puede saber cómo comienzan los bombardeos, pero no tienen ni idea de cómo acaban ni han calculado bien los terremotos colaterales que causan.

Obama jura que sólo atacarán dianas precisas en un periodo de tres meses máximo, y que el fin no es tumbar al régimen sino castigarlo por usar armas químicas en una masacre.

¿Creerá que un Estado como el sirio, acostumbrado a la guerra, se quedará de brazos cruzados aguardando que le lluevan misiles? ¿O que sus principales valedores, Rusia y China, se harán los pendejos?

Y es vomitiva la doble moral de Occidente. Por décadas, el egipcio Mubarak fue el amigo más adorado pero un día ayudan a tumbarlo por tirano. Luego les asusta el triunfo cantado de los Hermanos Musulmanes, los únicos con estructura social y política, y permiten que los saquen en un golpe de Estado.

Para ellos, unos dictadores son siempre buenos, así sean megacorruptos y bárbaros con las mujeres –Arabia Saudita y los Emiratos–, y otros pueden ser estupendos o detestables, según sople el viento. No olviden que Sadam Husein fue el gran aliado de Washington.

El sátrapa sirio, amigo de Irán y de Hezbolá, es fiel reflejo de su padre, un déspota despiadado. Pero la guerra de Obama solo expandirá el conflicto y no solucionará nada.

PARA LEER

EL ESPECTADOR

MI CONFESIÓN

Fernando Araújo Vélez

La verdad es que ya ni siquiera aspiro a que usted me dé una bendición, reverendo.

Vengo a confesarme con usted  para quedar en paz conmigo misma, si es que puedo encontrar esa paz, no para llegar al cielo ni para que usted me diga que caí en pecado y me condene al infierno, con sus infinitas llamas y sus demonios. No le voy a decir que caí en la tentación, porque no fue así. Lo que usted llama tentación, yo lo fui construyendo día tras día, desde que nació mi hijo, Saúl, hasta que cumplió 16 años y lo acosté conmigo en mi cama y le quité la ropa y me la quité yo. Esa noche no hubo tentaciones. Hubo, si lo prefiere, un largo proceso meditado que surgió de comprender y padecer el mundo de los hombres, usted incluido. Ese mundo arrogante que requiere de siervas como yo.

Fui una sierva desde que nací. De mi padre, de mis hermanos mayores, de los maestros, de mi primer novio, del muchacho que me dejó embarazada y de mis jefes y profesores. De Dios, de sus discípulos y de usted, que se pavoneaba por la vida como si en realidad estuviera tocado por la varita de la Verdad y la Bondad. Tuve que obedecer siempre. Honrar a mis padres, a mi padre sobre todo. Amar a Dios sobre todas las cosas, óigalo bien. Sobre todas las cosas, ¿lo entiende? ¿Por qué debía amarlo de esa forma? Porque era Dios. Dios hombre, Dios eterno, Dios. ¿Para qué? Para poder estar a su lado algún día. Cuando yo comprendí semejante soberbia, acababa de terminar el bachillerato. Me callé entonces y me he callado durante todos estos 20 años.

Ahora vengo a confesarlo, pero no para que usted me perdone, no, ya se lo dije. Sólo quiero que me escuche. Que sepa y sufra que desde niña mis únicas opciones eran casarme o ser monja. Y si quería tener mi propio dinero, dar clases de algo o, a escondidas, venderme a los altos representantes de nuestra sociedad, o sea, a usted, los banqueros, los políticos, los militares, o en dos palabras, los hombres. Deseché todas esas opciones. Por venganza, si quiere. Por convicción, por rebeldía, por ira. Estudié más que nadie, trabajé, seguro también más que muchos, y de esa manera me independicé de ustedes y de sus mandatos. Decidí ser inteligente, pues la inteligencia me daría libertad, pero quedaba el amor. Eso que llaman amor.

No le voy a negar que me hacía falta. Que soñaba con un hombre, que envidiaba a otras mujeres. Sin embargo, eso, un hombre y el amor, habrían sido la esclavitud. Cadenas, pues, como decía un filósofo, las cadenas más fuertes provienen de los más poderosos amores. Por eso, por todo eso, desnudé a mi hijo y hasta tuve un hijo con él. Mi nieto es mi hijo, sí, y yo soy su madre y su abuela.

PARA PENSAR

EL ESPECTADOR

ÓRGANOS, NACIONALIDAD Y PRIVILEGIOS

Héctor Abad Faciolince

Hace unos seis años un escritor de nombre Fernando Vallejo Rendón —que se presenta como el adalid de la palabra empeñada en Colombia— declaró que renunciaba a la nacionalidad colombiana, que adoptaba la mexicana, y que en adelante no quería saber nada más de esta “mala patria” que ya no era suya pues, según escribió con patética emoción, “lo que me reste de vida lo quiero vivir en México y aquí me pienso morir”.

Pocos meses después el señor Vallejo tuvo un problema de córnea y, como confiaba más en los hospitales de su “mala patria” que en los de su nuevo país, vino a que le hicieran un trasplante aquí. Pero había un problema: por una ley colombiana, la córnea se puede trasplantar solamente a los nacionales. Con lo cual el señor Rendón tuvo que tragarse sus palabras y desempolvar su vieja cédula de ciudadanía. No lo critico por esto y antes me alegra mucho: fue malo para su lengua (se la tuvo que morder) pero muy bueno para sus ojos, que volvieron a ver bien.

La historia viene a cuento porque esta semana la Corte Constitucional falló una  tutela en contra de un ciudadano brasileño que pretendía entrar, en igualdad de condiciones con los colombianos, en una lista de espera para trasplante de hígado. Su cirrosis hepática lo tenía en riesgo de muerte, y como todos los seres humanos somos iguales (sin importar dónde nacimos ni dónde nos queramos morir), el brasileño decía que lo tenían que trasplantar aquí. Al fallar en contra del brasileño la Corte dice, en resumidas cuentas, que todos somos iguales, sí, pero que algunos son más iguales que otros, y en el caso específico del trasplante de órganos, los colombianos somos más iguales que los extranjeros.

Los motivos que aduce la Corte para privilegiar a los nacionales frente a los extranjeros son razonables: los extranjeros no pagan impuestos aquí, y por lo tanto no han contribuido a nuestro sistema público de salud; son sus propios países los que deben garantizarles el derecho a la salud; y por último al extranjero se le puede hacer el trasplante siempre y cuando “no existan receptores nacionales y extranjeros residentes en las listas regional y nacional de espera”.

Hasta aquí todo parece sensato y no debería haber discusión. Sin embargo, cuando uno examina más a fondo el asunto, se ve que si adoptáramos una política doctrinariamente nacionalista en la posibilidad de hacer trasplantes, podríamos vernos a la larga perjudicados. Si hoy en día un venezolano necesita trasplantarse el hígado, no encuentra en su país un buen hospital donde hacerse este procedimiento. Esto se debe a una tradición médica más pobre, y también a la retórica chovinista. En Medellín, Cali y Bogotá se hacen desde hace años trasplantes a extranjeros (menos del 2% del total), cuando no hay nacionales en la lista de espera a quienes les pueda servir el órgano disponible. Recuerden que el hígado de un adulto de 1,80 con sangre O- no le sirve a un niño A+. En general los extranjeros pagan bastante por este procedimiento, y de tal manera, indirectamente, han subsidiado no sólo el entrenamiento de muchos médicos especialistas, sino también la compra de recursos técnicos de última generación.

Colombia es líder en materia de trasplantes en la región gracias a que hay una cultura de la donación y normas que la favorecen. Hacer escándalos patrioteros por el tal “turismo de trasplantes”, o falsas acusaciones de tráfico de órganos, solamente perjudica una práctica médica ética, que funciona bien. En Colombia, más que hacer falta, sobran órganos, y estos a veces se desechan porque no encuentran el receptor idóneo (que podría ser extranjero). A alguien que haya renunciado a ser colombiano no habría que negarle una córnea —si sobra— sino simplemente cobrársela más

ESPIRITUALIDAD

VANGUARDIA

PARA LLEGAR A LA CIMA

Euclides Ardila Rueda

El éxito es la conjugación de tres cosas: habilidad, oportunidad y valentía para sobreponerse. Ese último ingrediente es el que permite poner en práctica lo que el fracaso nos ha enseñado.

Antes de comenzar a leer esta reflexión, repita la siguiente frase: Todo irá bien a partir de ahora.

Si lo decreta en su mente de esa forma, empezará a ver las cosas de una manera más positiva.

Aunque no lo crea, usted ha sido destinado para ser una persona exitosa y lograr todos sus objetivos. Lo que pasa es que, por alguna razón, todavía no se toma en serio ese tema.

Es cierto que a veces en su vida las cosas les salen muy diferentes de como las ha planeado. Pero no por eso usted fracasa.

¿Por qué será que cuando tropieza usted procede en la vida como si pensara que el futuro jamás le va a cambiar para bien?

Respóndase la siguiente pregunta: ¿qué pasó con eso que se propuso hacer a comienzos se este año? ¿Ha logrado algo o no?

A lo mejor se desanimó ante la primera vicisitud. Ese es un errado proceder, sobre todo, porque un problema suele ser como la niebla: aparece por un momento y luego se desvanece.

Si piensa que está vencido, lo estará; si no se atreve, no lo hará; si sabe que le gustaría ganar pero no puede, tarde o temprano perderá.

El éxito comienza con la voluntad del hombre. Muchos deportistas perdieron sus carreras atléticas porque siempre creyeron que no las ganarían.

¡Piense en grande y sus hechos crecerán!

Durante los días que quedan de este año se disiparán todas sus agonías y llegará a esa meta que tanto ha anhelado.

Ahora bien, si Dios le pregunta hoy mismo: ¿qué puede hacer por usted?

¿Qué le solicitaría?

Reflexión

¿Ha caminado descalzo?

A lo mejor lo hace en su casa o en la piscina.

Gracias al calzado usted va y viene. Y con cada paso conduce su humanidad con la seguridad de que nada le va a pasar a sus pies.

Es más, camina tan seguro que casi no mira al piso para ver por donde va.

Los zapatos pueden estar viejos, pero usted termina queriéndolos. Tanto que cuando compra unos nuevos, los callos hacen su aparición como ‘señal de protesta’.

Pero, ¿es consciente de que sus zapatos, al igual que los de todo el mundo, tienen grandes agujeros?

Haga este ejercicio:

¡Póngase los zapatos de su hermano! Luego camine con ellos al menos 20 segundos. Y si el dueño de esos zapatos está cerca, hable con él durante un minuto.

Déjenos adivinar qué puede pasar:

... Es probable que los zapatos no le tallen.

... ¡De pronto se tropieza!

... Tal vez no se los aguante.

Cada vez que pueda, haga este ejercicio.

Verá que para intercambiar su punto de vista con otra persona tiene que ponerse los zapatos de su prójimo. De esta forma usted transforma su actitud crítica y termina comprendiendo al dueño de los zapatos ajenos. Esa es una fórmula sana para comprender mejor a los demás y, por qué no, para hablar con ese ser que jamás ha podido entender.

Vitamínico espiritual

Dicen que la vitamina “E” es esencial para el organismo, pues lo cuida de la formación de moléculas tóxicas. Ella se encuentra en la yema de huevo y en varios aceites vegetales germinales.

Pero en la vida real existe una vitamina especial: la “E…spiritual” , la misma que ayuda más al alma que al cuerpo.

¿Dónde se encuentra? En el corazón y de él emana suficiente sangre como para que se anime a vivir y a luchar por sus metas. Para ello, nos corresponde alimentarnos de fe y energía.

El sentido de la vida

Cuando usted se mira por dentro y se cuestiona para dónde va, ¿qué es lo que refleja?

A veces no sabe ni responder esas preguntas.

Si bien es cierto que usted es exitoso, por alguna razón no le encuentra la esencia a su vida.

¿Por qué será que le sucede eso?

Porque cuando usted camina sin fe, termina impregnado de aburrimiento y así se elimina la chispa de la vida; es decir, aniquila su propio entusiasmo.

Los que saben de conducta humana admiten que el aburrimiento crónico es una epidemia muy colombiana.

¿Qué hacer? A decir verdad, no hay que realizar muchas cosas para encontrarle sentido a su vida. Basta con creer que puede hacer algo para lograrlo.

La clave está en el amor con el que haga las cosas. Usted puede ser el embolador más sencillo del mundo, pero si lustra las botas con cariño, le encuentra sentido a su oficio.

¡Hay que ver las cosas de una manera distinta!

No es un asunto de palabrería; es cuestión de tomar las duras realidades que le ofrece la vida y convertirlas en retos.

No hay por ahí ninguna receta o ningún libro que les dé soluciones a sus problemas, porque ellas se encuentran en usted mismo.

Lo que le corresponde es cambiar la actitud para sobrellevar sus angustias.

Ojo: no se trata de ignorar los problemas; la idea es enfrentarlos, pero con estrategia y con la mayor serenidad posible.

Por último recuerde: el entusiasmo logra en un solo instante lo que la razón, la violencia, el aburrimiento y la crisis no consiguen en años.

Consejos prácticos

• Disfrute del silencio y cierre sus ojos por un momento.

• Por algunos instantes, lleve a ‘ceros’ su mente.

• Pida perdón a Dios.

• Solicítele que maneje sus días; invoque su bendición para su salud y para que renueve todas sus células.

• Pídale que lo proteja de todo mal y peligro.

• No deje de darle gracias a Dios por este nuevo día que le regala.

• Solicitar ayuda es bueno y necesario, pero hay que actuar. Con Dios no se trata solo de ‘pedir y pedir’, sino de merecer sus dádivas.

FARANDULA

EL TIEMPO

TRES BUENAS NOTICIAS

Ómar Rincón

En el mundo televisivo y audiovisual pasan cosas buenas y muchas. Esta semana van tres de las últimas: Telemedellín gana premio; Don Ca, un documental que usted debe ir a ver en cine, y el director Vélez descubre a Colombia. Bienvenidos.

Telemedellín es el canal público más innovador de Colombia, y lo es porque se atreve a intentar otros formatos, distintas maneras de programar y hacer de la televisión un hecho social.

Su último invento fue M-24. 24 horas entre el 22 y el 23 de febrero del 2013 viendo a Medellín desde distintos puntos de la ciudad y contando a sus ciudadanos a través de los videos enviados por ellos mismos.

Con M24, Telemedellín documenta que los ciudadanos quieren y pueden ser cocreadores de contenidos de la televisión, ya que le llegaron, en 24 horas, 1.900 videos, 7.722 menciones en Twitter, 12.200 visitas a m24., 1.134 nuevos seguidores para @telemedellin, 20 mensajes por minuto en Twitter. Una experiencia que demostró que la gente es la verdadera estrella de televisión: la gente quiere estar en las pantallas, cuenta y sabe contar.

M-24 ganó el Premio Internacional Creatividad Innovación Televisión 2013 en la categoría Multiplataforma. Este premio fue entregado por el Centro Internacional de TV Abierta, que celebra a “los profesionales capaces de concebir e implementar iniciativas que aportan al desarrollo de las marcas y encantan a las audiencias”.

Telemedellín fue reconocido como experiencia innovadora en TV colaborativa ya que amplió la experiencia expresiva de los televidentes al integrar las plataformas de los canales de TV Abierta (mobile, website del canal, TV social) con las redes sociales y los videos de la gente. Vale la pena experimentar, arriesgar e innovar.

Don Ca es un documental magnífico que nos muestra de una manera simple y contundente a Colombia. Un retrato en primera persona sobre cómo un hombre blanco se va al Pacífico y se encuentra con el paraíso para después vivenciar los miedos que nos habitan.

No hay personajes buenos ni malos, solo las ambigüedades en primera persona de este país llamado Colombia. Este documental está en cines, lo puede ver desde el 13 en cartelera nacional.

Y no deje de verlo, le juro que lo conmoverá por el personaje, el paisaje, las amistades, las sonrisas y los miedos. Si usted va, podrá conocer de qué está hecho este país. Si quiere conocer la Colombia de verdad, vaya a ver Don Ca, un documental de Patricia Ayala. Una experiencia de realidad documentada que vale la pena vivir.

Luis Carlos Vélez es “el enviado especial” de Caracol a todos los eventos internacionales: Venezuela en elecciones, elección del papa, el papa en Brasil. Informa para Colombia desde las ‘extranjas’. Pero, fue a Tunja, a Boyacá, a lo arcaico e informó del paro de la ruana.

Y llegó allí y descubrió que si escucha encuentra las historias. Y dejó hablar a una señora que pasaba por ahí, y ella contó de manera periodística, o sea simple y concreta y narrativa, en qué consistía el problema del paro.

Toda una lección de periodismo de doña Elizabeth: callarse, escuchar y saber contar. Bien, señor director por ir a donde la gente de verdad.

JET SET

Al oído

Punto de vista.

La exitosa serie de Caracol Televisión, Escobar, el patrón del mal, fue motivo de inspiración para el Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, quien dedicó su columna “Piedra de toque” en el periódico El País de España, a esta súper producción emitida en Colombia en 2012. El escritor peruano destacó la calidad con que fue realizada la serie y aseguró que tendrá total éxito en todos los lugares donde sea exhibida; además, comentó: “es una producción muy bien escrita y dirigida, y Andrés Parra, el actor que encarna al famoso narcotraficante Pablo Emilio Escobar Gaviria, lo hace con enorme talento”. En su texto, Vargas Llosa confiesa que vio los capítulos de principio a fin. “Aunque se toman algunas libertades con la historia real y han cambiado algunos nombres propios, dan un testimonio muy genuino, fascinante e instructivo”, afirmó el escritor sobre esta historia.

Sit Down Tragedy.

Martín de Francisco y Santiago Moure regresan con ‘La Tele’ y esta vez no en dibujos animados, ni en tv, ni en radio, lo harán en las tablas del ‘Gaira Café Cumbia House’. Cada lunes y hasta el 21 de octubre, esta pareja sin igual presentará una obra que en palabras de Martín: "Es un psicoanálisis en público donde afloran los más recónditos problemas de la pareja cómica; sus miedos, sus culpas y la historia que constituye el dúo de Santiago y Martín. Es una Sit Down Tragedy, en el que nos respondemos porqué somos así como colombianos", concluye. Martín y Santiago quienes hicieron de la "chibchombianidad" un referente generacional, sorprenderán con este nuevo capítulo en vivo de ‘La Tele’, que después de veinte años, llega con temas nuevos, irreverentes, divertidos, sarcásticos, y hasta quizás algo más maduros y sensatos. Eso se descubrirá en la puesta en escena que se llamará "Lunes de la Tele: con Moure & de Francisco".

Invitado de lujo.

El cantante bogotano Fonseca, fue uno de los selectos invitados a acompañar a la cantante mexicana Alejandra Guzmán en la grabación de su álbum “Primera Fila” el pasado 8 de agosto en Ciudad de México. La participación de Fonseca resultó en la emocionante versión de un tema inédito de la cantante mexicana en el que se fusiona el rock, la cumbia y el vallenato. Junto a “La Guzmán” invitó además de Fonseca a otros influyentes artistas latinoamericanos como Robi Draco, Mario Domm, Beatriz Luengo y Dani Martín.

Sí son 2.

Vuelve el programa del comediante colombiano Andrés López exclusivo para OnDirectv, que llega a más de 5 millones de televidentes en Latinoamérica. Tras el éxito de la primera temporada, “Andrés López de noche” llega con su ‘Sí son 2’, nuevo look y grandes invitados entre los que se cuentan Beto Cuevas, Alex Ubago, Miranda, Cecilia Bolocco y Kany García. Visto en más de 10 países la primera temporada del programa logró superar el promedio de ratings semanales del canal.

Voz de la experiencia.

La destacada actriz Margalida Castro, a quien vemos como Pastora en la producción ‘El día de la suerte’, asegura que dentro de su nutrida carrera, este personaje es uno de los más exigentes que ha interpretado. “A Pastora la lloré mientras estudiaba los libretos, ensayando, grabando y ahora lloro viéndola al aire. Es el personaje sobre el cual recae la carga dramática en la historia. Una madre que sufre por sus hijos, en especial por Reinaldo (Ramiro Meneses) quien es el ‘Caín’ de la historia”, asegura Margalida, quien reconoce que a pesar de lo agotador de su trabajo, fue un verdadero privilegio hacer parte de una historia, que considera muy bien escrita.

Personaje de peso.

Ana Bolena Meza, quien personifica a Celia Puentes en la película ‘Crimen con vista al mar’, que se estrenó el pasado viernes 16 de agosto, afirma que cuando un personaje requiere de ciertos cambios, ella no tiene ningún problema en hacer lo que la producción necesite. “Para esta cinta, el Director español Gerardo Herrero, quería que Celia se viera como una mujer muchísimo mayor, por su relación con un joven 20 años menor que ella. Por eso me pidió que subiera de peso. Aumenté 10 kilos y una vez terminó el rodaje, me puse juiciosa a hacer ejercicio y dieta y ya he bajado 4 kilos”, mencionó la actriz.

Comedia inédita.

Un jurado integrado por los directores Fabio Rubiano y Carlos García escogió el proyecto “Granujas”, presentado por el director y dramaturgo bogotano Santiago Merchant, como el ganador del Premio Fanny Mikey al Teatro Colombiano 2012. Esta comedia inédita será producida en su totalidad por el Teatro Nacional, para ser estrenada el próximo año. Al mejor estilo de las historias de gángsters, “Granujas” mezcla la ficción, el cine negro, el cómic y el absurdo para contarnos una historia de pillos tipo Good Fellas, envueltos en una trama de malentendidos, conspiraciones y persecuciones.

Deportista consumada.

Kimberly Reyes, Sofía en ‘El día de la suerte’, es común que suba en sus redes sociales, fotos o videos de ella haciendo ejercicio. Sin embargo, la actriz aclara que no le gusta asistir al gimnasio común. “Estar sentado en una maquina haciendo repeticiones me parece tedioso. He sido deportista toda mi vida, durante 14 años jugué voleibol y participé en torneos departamentales e interuniversitarios. Ya no lo practico pero encontré una adrenalina parecida a la que sentía, en el boxeo, en el kick boxing, en los ejercicios que requieren saltar, correr”, sostiene la barranquillera, quien añade trata de hacer deporte todos los días, pero que no lo puede hacer por el ritmo de las grabaciones.

¡Luces, Cámara, Acción!

Arrancó este mes en Iguaque (Boyacá) el rodaje del largometraje Malos Días dirigido por el caleño Andrés Beltrán y producida por Río Bravo Entertainment, y un equipo de 20 personas. La cinta protagonizada por Roberto Cano (La Lectora) Gloria Montoya (La Sangre y la Lluvia) Alejandra Chamorro (El Cartel de los Sapos) y Cristóbal Errázuriz, contará con la presencia de otros actores como Nelson Camayo, David Valencia, Luis Felipe Cortes, Carlos Fonseca y la participación especial del escritor australiano Joe Broderick.

Orgulloso D.T.

Interpretar al técnico que le dio tantas alegrías al país con la recordada selección del “toque – toque”, ha sido una experiencia muy gratificante para Ramses Ramos, pero a la vez con mucha responsabilidad: “Hay un compromiso muy grande con este personaje por lo que representó para Colombia, porque los jugadores y técnicos de aquella década terminaron convirtiéndose en íconos de nuestra historia y nuestra cultura. Además porque Maturana representa a un personaje de nuestra población afro colombiana, lo cual me llena de mucho orgullo”.

Así será Festiver.

En esta tercera edición, el Festival de Cine Verde de Barichara, presentará más de 60 obras cinematográficas de 15 países, de las cuales 31 estarán en competencia y cuyo objetivo es sensibilizar a todos los asistentes sobre el medio ambiente y la importancia de su protección y sostenibilidad. Argentina, Brasil, Bolivia, Holanda, Austria, Canadá, España y México son algunos de los países que participarán en esta edición. Del 17 al 21 de septiembre Barichara vivirá 5 días en los que todos los asistentes podrán disfrutar de forma gratuita de lo mejor del cine verde del mundo.

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